Cronicas de Espana

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Cronicas de Espana
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Spanish
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Cronicas de Es pana Uno de los dones mas pretiados que a España legó el inolvidable General Primo de Rivera, fué la enseñanza, o por mejor decir, la restauración del valor cívico, que si no desaparecido poo-C'Ompleto yacía en un doloe fat· niente, entre los elementos monarquicos, y debido acaso a ello, los partidos opuestos cobraban brios y no escatimaban hae:er acto de presencia en c_uantas ocasiones se presentaban. Como r~ultado de aquellas lecciones fueron muchos los que sa1ieron de su marasmo y comprendieron que la política de brazos cruzados. solo lleva1·ía a ir perdiendo terreno, a lo que contribuiria también la actividad de otros elementos, en ·~pecial los que forman en las filas de.I socialismo o de ·la repúblic.-a, y los herederos políticos del malogrado «D. Miguel», no han estado remisos en poner en práctica las disposiciones recibidas y de aquí los meetings de propaganda a cargo de la Unión Monárquica, cuyos paladines son el ex ministro Conde de Guadalhorce, que regentó la cartera de Fomento durante la Dictadura, un hijo del Gral. Primo de Rivera, y otros varios, que sin dudas ni vatilaciones, arrostrando amqnazas y amarguras, realizan por España una campaña en defensa del orden y de la Monarquía. Como en crónica anterior os decia, los republicanos celebraron en Madrid un nicefng, e.n el que hicieron uso de la palabra los primates del partido, sin otras trabas que las naturales medidas de precaución, que aforturiadamente no fueron necesarias, pues nadie alteró la celebración del acto y los que no militamos en su iOeario, no realizamos la menor campaña que impidiEra aquella. · Pero este respecto a las ideas agenas por lo visto no rige. para los que no las profesan, y tan pronto la Uni-On Monárquica anuncir.ba en cualquier capital una nueva reunión, era lo bastante para que los seil.ores de la acera de enfrente se pusieran en campaña para impedirlo por todos los medios a su alcance, promoviendo disturbios, declarando huelgas, etc. etc., que as:: entienden la libertad estos señores que se consideran a si propíos defensores de ella. Y Andalucia, Galicia, Asturias, veían que la revuelta y el desorden eran el anuncio previo de un meeting a cargo de la Unión Monárquica. Y llegamos al acto de Bilbao célebrado el domingo pasado donde los acontecimientos llegaron a su cima, y de los que os hago gracia ya que por las informaciones de prensa, mas rápidas que la mía, tendreis, cuando esta crónica llegue a viiestras manos, un relato más o menos fiel de lo que allí ocurrió . Es característica de los contratistas de la tranquilidad pública, escurrir el bulto una vez organizado lo que ellos creen una proeza, y en esta materia y en el aspecto organizador, hemos adelantado mucho con los. saluda-bl.es EUempl-0s y el aprendizaje recibido de la patria de la piel, y cla.ro es que a Rusia me refiero. Los procedimientos del bolcheviquismo son cosa buena y ' hay que aprovechar las ocasiones para ponerlos en práctica,. . . pero tocando paso ligero y desapareciendo del lugar de la acción, por si acaso. Esto es sencillamente lo que ha hecho el lider lndalecio Prieto con ocasión del meeting monárquico de Bilbao, según la vox populi, que suele no equivocarse. El hombre preparó sus huestes, dió instrucciones, organizó los elementos perturbadores. . . y se marchó la víspera a Zaragoza, donde daba la pícara casualidad de que tenía que hablar en otro acto republicano. Pero apa.reció el valor cívico a que al principio me refieTo, y desoyendo amenazas y vaticinios, se presentaron en la capital de Vizcaya, Guadalhorce, Primo de Rivera, Calleja, Yanguas, y cuantos habian anunciado su actuación, dijeron lo que tenían que decir ante 7. 000 espectadores, y nada más. Cierto es que la tranquilidad en la población fué alterada y desgraciadamenta la sangre corrió por las calles; el asalto a tiendas y destrozo de tranvias, fueron cosa corriente durante el día, habiendo que lamentar la muerte de algún pacífico vecino, ya que las autoridades, dando un ejemplo acaso de exceso de mesur·a, no extremarnn la nota dei rigor en la represión, y solo en caso extremo la Guardia civil y la policía hicieron uso de las armas. Pero como ven ustedes hay que gritar ¡Viva la libertad! ... de hacer lo que me da la gana, pero irhpidiendo a los demás el ejercicio de sus derechos. Sigue la incognita sin despejar en Jo que a huelgas se refiere, y estas continuan haciendo su aparición en forma esporádica en diversas capitales de provincias, con análoga tácti<:a a las ya terminadas. Zaragoza se prepara a celebrar las fiestas de su Virgen Patrona, la Pilarica; pero sin duda como elemento para la atracción de forasteros, los chaufeurs y cocheros, con ura opo1·tunidad que pudierarnos calificar de suicida, anunciaron la huE!'lgv precharnente para los días de las fiestas, demostrnndo un desprendimiento y un altru'smo enorgut!ec:edor, ya que renuncian motu 1n·o7¡io a la propina que hab:a de caer pródiga en sus bolsillos, merced al elemento indigena y forastero que en esos días acude a la inmortal e:iudad. tadores, se lanzaron al proceloso charco unos cuantos señores de buena voluntad y unas cuantas esculturales ondinas, que en resumidas cuentas fueron las que coparon los premios; ¡ siempre Fémina veneedora ! La catástrofe del dirigible «R-101», ocurrida en tierras de Francia, ha ca.usado dolcrosísima impresión en toda España, tanto por el número como por la categoría de los tripulantes, nuevas víctimas del progreso, cuyo sacrificio estéril solo servirá para perfeccionamientos y estudios que en un porvenir que todavía parece lejano, den a la navegación aérea garant: as y seguridades que de momento no existen. Y ya que de Zaragoza hablo y dirig:éndome en especial a mis compatriotas en esas islas, voy a per· mitirme por una sola 11 ez, actuar de sablista, para permitirme pediros, lo que seguramente 8.lgunos habreis hecho ya. El templo del Pilar se halla en estado ruinoso, es acaso el mas español de todos, y su gloriosa tradición exige que cuantos nos h¿nramos con el nombre de españoles contribuyamos a que no ocurra una catástrofe. Se han iniciado con éxito brillante muchas suscripciones Fuerza~ de la G1mrdi(I Civil saliendo de dar gff(f1'dia en el Palacio Reol de Madrid. Los estudiantes siguen por ahora siendo buenos chicos; se celebró la apertura de curso en Madrid con la mayor normalidad, y con la novedad de tomar parte en la cepara poder realizar las enormes obras de consolidadén que se precisan, en evitación de una ruina; ¿querreis contribuir vosotros a esta obra que no dudo en calificar de nacional, y que vuestros don2.tivos sean una nueva demostración de lo que tantas veces habeis probado, ele vuestro amor a la madre patria, y en este caso a Ja Madre (;omún de todos? Por eso os suplico, ¡una limosna para la Virgen del Pilar!, y a fe que algún maño de los que me lean y muchos que no lo son, acudirán a este llamamiento en la medida de sus fuerzas. Y dicho esto envaino el sable, y a otra cosa. ·- Los proyectos de convertir a M,adrid en puerto de mar, quedaron aplazados para mejor ocasión, y aquellas playitas artificiales con su arena y sus olas, es de esperar que· no resuciten hasta el próximo verano; pero la nota náutica y las aficiones marítimas no pod!an quedar en el olvido, y héte aquí, que en pleno eStanque del Retiro hctmos tenido un concurso de natación capaz de emular la travesía del canal de la Mancha, y ante un numeroso cónclave de especremonia inaugural un estudiante que pronui1ció un discurso de tonos políticos. Esta nueva modalidad de la actuación escolar me parece completamente absurda, pero nuestras Universidades son víctimas de la política, y debido al profesorado y a sus campañas, nada tiene de extraño que los escolares no hagan sino seguir los ejemplos y enseñanzas que reciben. En otras provincias, en evitación de mayores males, no se celebró aun está anticuada ceremonia, y en otras, Barcelona por ejemplo, hubo que suspenderla a mitad de la solemnidad. Nuestro furibundo separatista Maciá, injustamente desterrado por Primo de Riv'era, volvió a pisar la madre patria, y hubo que pone-rle otra vez en la frontera,. . . belga, pues tampoco en Francia resulta huesped grato; nada, injusticias que se cometen, pero esta expulsión dió pie para que los estudiantes catalanes exteriorizaran su protesta. Y acaso aquí no haya habido perturbaciones escolares, o por no ser todavia ocasión propicia o por carecerse de ambiente para ello; de una parte la Asodación de padres de familia, que ha intervenido para que los tiernos retoños se dejen de algaradas y revueltas y de seguir consejos agenos que a nada práctico conducen, y de otra un toque· de atención del Dr. Albiñana que al frente de sus huestes los «Legionarios de España» ha anunciado su inmediata y contundente interventión en cuanto la libertad de la cátedra y el derecho de asistencia sea objeto de violencias o de coacciones, el hecho es que nadie se ha movido, y ójala sigan las cosas por este camino, ya que el ideal de la juventud no debe ser otro que el del estudio y el llegar a ser en su día útiles a la patria. Varias veces he dicho a Vds., que del famoso estudiante Sr. Sbert otra víctima de la crueldad y la arbitrariedad de la Dictadura, nada se hablaba ni se decía; pues bien, agárrense bien Que viene una curva: hace pocos días apareció una disposición ministerial confiriendo al Sr. Sbert la representación ofitial de España en el Congreso de estudiantes que proximamente se celebrara en Méjico, Así se hacen las cosas en este pintoresco país. Precisamente en los attuales días se está celebrando la Semana del Libro, por última vez en esta fecha ya que a partir del próximo año, te.ndrá lugar el 5 de abril, fecha de la muerte del glorioso manco de Lepanto ¡Ay, si levantara la cabeza, y viera los engendros literarios que en plena vfa publica se exponen!, a buen seguro que manco y todo y fn defensa de la literatura tendrfa que¡ causar destrozos en escaparates y tabládillos, y pensando en su D. Quijote, mandoble en mano y no en Rotinante sino en un modernísimo Renault, recorrería librerías para inutilizar hasta el últ'mo ejemple.r de ciertas obras que valiera más permaneciesen en el montón del anónimo. Conw en años anteriores, hay exposición de libros .en plena vía pública y han sido va.ríos los establecimientos que han acudido al concurso de est8.parates adornados, viendose algunos exquisitamente presente dos. El libro cumbre no se sabe aun cual es, pues las novelas de guerra, por efecto de su abundancia interesan ya poco; tal vez Wenceslao Fernández Flores, con su libro «Los que no fuimos a la gu9-.·ra» sea uno de los ,que mejor aeog!da obtenga. Por lo demás, abunda la literatura rusa con sus obras palpitantes sobre bolcheviquismo, y lo vistoso de sus portadas chorrea.ndo tonos rojcs, atraen la mirada del transeunte, pero no lo animan a la adquisición, ya que la vida de Trostky contada por el mismo, no creo sea de una amenidad excesiva; pero en fin hay gustos para todo. Nuestra benemérita Guardia Civil, de tan gloriosa tradición en nuestro país, y a la que b toca siempre actuar de fuerza de choque en los conflictos populares, se dispone a celebrar la festividad de su patrona la Virgen del Pilar, si las circunstancias no lo impiden, pues habrá poblaciones en que el servicio es permanente, y en estas condicionos no hay posibilidad de festejos y diversiones. Gráfitamente pueden Vds. ver en la foto que aparecerá en estas columnas a este Cuerpo militar saliendo de dar guardia en el Regio Altazat. Y hablemos de politica, que por lo desagradable del asunto, he ido aplazando hasta el final el ocuparme de él. Seguimos en la mayor desorientación, continua la palabra crisis oyéndose a cada momento, y siendo -desmentida oficial u oficiosamente; pero todo ello revela la inestabilidad de la situación, la falta de fuerza y de unidad de criterio¡ pasaron aquellos siete años en que apenas hubo modifitaciones en el Gabinete, y como es lógico las aspiraciones al poder se han exacerbado y las ambiciones van siendo cada día mayores. Se habla con insistencia de una nueva cominacbión ministerial en forma de pequeña crisis, dando entrada a nuevos Ministros, con la presidencia del Gral. Berenguer, y no se niega tampoco la posibilidad de un Gabinete presidido por Santiago Alba, quien anuncia su regreso a Madrid para el próximo noviembre, acaso para empuñar en esta fecha las riendas del gobierno, solución que no cuenta con las simpatías de nadie, ni mucho menos, y desgraciadamente volvemos a los tiempos pasados de variar de política a cada momento. Mientras tanto las elecciones sigue sin saberse ni por quien ni cuando se harán¡ la peseta baja que baja; el -estado del país en medio de la anormalidad, sin que nadie marque una orientación ni sepa a que atenerse¡ las subsistencias por las alturas, y con todo esto un estado de verdadera nfJrviosidad y la sensación de faltar una personalidad de prestigio que impusiera ta tranquilidad y la confianza sin reparar en medios para lograrlo. El tiempo de pleno verano; la sequia prolongadísima este año, es ya motivo de preócupación para los agricultores, por la difitultad de empezar la sementera en bue.nas· condiciones por la excesiva sequedad de la tierra, en otros años y por esta época había recibido los saludables efectos de la lluvia. Y basta por hoy, que harto ha ocupado vuestra atención con el relato de lo poco agradable" que ha ocurido en la decena, vuestro cronista matritense que envidia la paz octaviana que disfrutais, deseando no verla alterada. UN SEÑOR DE LA CORTE. 10 de octubre de 1930.