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La apelación del Vice-Minlstro de Sanidad, Trabajo y Bienestar Público pidiendo donantes de san­ gre, será una prueba real del pa­ triotismo y humanitarismo de mu. chos que están en posición de ce­ der sangre para la transfusión durante los raids. Es demasiado obvio decir que el donar la san­ gre de uno, especialmente en dias cuando la escasez de alimentos no permite a muchos ser genero­ sos en cuanto respecta a su san­ gre, es Inmensamente más difícil que ceder el arroz en exceso para beneficio de aquellos nuestros her­ manos que lo necesitan urgente­ mente. e • ♦ Parece un poco extraordinario pero con frecuencia psicológica­ mente cierto que cuando el sacri. fíelo envuelto es mayor y mas arriesgado, es cuando se despier­ ta más la afición a la aventura en los corazones de muchos. Cuan­ to mayor sea el riesgo, mayor es el valor que se demanda e Impli­ ca y más pronta y generosa la respuesta. Nos referimos a aque­ llos que captan el esp’ritu de las cosas. Hay una buena dosis de patrio­ tismo también en esto. Si los héToes y los mártires de la causa de la libertad filipina en el pasado gustosamente derramaron su san­ gre en el campo de batalla o en el martirio, icuan más directo e inmediato es el bien que un do­ nante de sangre podrá hacer ofre­ ciendo su sangre para que fluya y alargue la vida de sus compa­ triotas gravemente heridos duran­ te los raids enemigos! Tanto en f''T"rndo. la sangre de hermanos en este pro­ ceso se mezcla. ¡Qué mejor sím­ bolo de unidad!
Date
1944
Rights
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