La Guerra de Corea

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Title
La Guerra de Corea
Language
Spanish
Source
Semana Volume IV (Issue No. 90) Septiembre 7, 1950
Year
1950
Rights
In Copyright - Educational Use Permitted
Fulltext
En la madrugada de un do­ mingo (el 25 de junio de 1950 para ser más precisos) las hordas comunistas de la Corsa La trágica madrugada del 25 de junio—un mundo se une por la paz—¿Despuntará el día? Por RAFAEL S. RIPOLL Tan Pronto como tanque aviones y tropas hollaban < paralelo 38, ,una Comisión c las Naciones Unidas, asignad Norte, sin previo aviso y sin haber mediado provocac'ón al­ guna, hollaron la línea imagi­ naria del paralelo 38 e inva­ dieron Corea Sur, iniciando así la más bárbara y la más peligrosa agresión en la histo­ ria reciente de la humanidad, exceptuando naturalmente, la agresión japonesa en la Gue­ rra Mundial II. Tanques en miríadas, avio­ nes, bien equipadas y bien en1 renadas legiones de infante­ ría, avanzaron desde la línea del paralelo 38 en dirección al objetivo inmediato: Seúl, la ca­ pital de la república de Corea. sos fusileros navales americanos en un camión, dirigiéndose apresu­ radamente al frente de batalla para reforzar las endebles filas alia» das. Abajo: soldados del l.Q de caballería descansando, tres en­ tragado* al sueño y un cuarto leyendo, (Foto Manila Timos) Dueños del elemento sorpresa y apoyados ,por la ventaja de una larga y cuidadosa prepa­ ración, las hordas comunistas avanzaron incontenibles, de un modo fulminante, arrollan­ do al paso de sus columnas de tropas y tanques, toda la débil resistencia que oponían los sudcoreanos democráticos de Rhee, numéricamente inferio­ res, mal equipados, mal orga­ nizados y peor situados a lo largo de una “frontera” sin defensas. El estruendo de los cañonee rojos y el tableteo de las ame{ralladoras; el alarido de los sacrificados y el humo de los incendios sumergió al mundo que despertaba casual y tran­ quilo aquella trágica mañana El general del ejército Douglas MacArthur, en pose caracte­ rística, a su llegada a Corea, en la segunda de sus visitas al frente^ MacArthur es ek comandante en jefe de las fuerzas de las 'Naciones Unidas en Corea» (Foto Mar.ila Times). del 25 de junio de 1950, en pe. nosa perplejidad: una repúbli­ ca independiente, Corea, era invadida por fuerzas armadas a todas vistas agresoras. Y la visión de Saravejo, y el Rin, y el corredor Polaco, Pearl ‘ Harbor mechas que incendia­ ron los polvorines del 14, del 38, del 41/, cobraron siniestro relieve. Y el mundo, en sólido bloque asentado en Lake Success, opuso a la sorpresa de la agre­ sión, la sorpresa de la acción y a la rapidez de la ofensiva la rapidez de una actuac’ón que no tiene paralelo tampoco en la historia. a Corea como ojos y oidos c la UN, se situaba en la escen de la agresión, cerca de Seu donde tenía sus cuarteles g< nerales. Alarmada por lo qu vió y oyó unas breves hors después cablegrafiaba urgente mente a Lake Success advii tiendo que la invasión coma nista “está asumiendo las ca racterísticas de una verdade ra guerra” y que “el manten' miento de la paz y la seguri dad internacionales está a menazado”. Instó que la “gra ve situación” fuese inmediata mente informada al consej de seguridad de las Nacione Unidas, .instancia que coinci día con la que acababa de ha cer aquella mañana, Estado Unidos. Y en efecto: Seúl vacilab sobre sus cimientos. En píen desmoralización unas divisic () 5 sudcoreanas que de ante,no habían sido diezmadas r la negligencia y el indi•entismo oficiales (¿Húbo aotaje?) retrocedían sin usa ni concierto, en un tris, imo replegarse hacia el sur, sta las riberas de la repúca. ¿Y hasta dónde desés?... Y cayó Seúl Idmotif un bordado de aldeas, villo. »s, colinas estratégicas, pa¡ de montaña, que iban sunbiendo, en riguroso turno, paso triunfal del'agreso. En Lake Success, Trigve secretario general de las iciones Unidas, convocaba listórica sesión de emergena los miembros del poderoconsejp de seguridad. Ru, en autoboicoteo entonces— iz coincidencia para el indo—no fué invitada por 5,—magnífico golpe de esitegia que jamás dejará de Artes de la tragedia de Taejon.—Tropas norteamericanas de la división 24, descendiendo en la estación ferroviaria de dicha ciudad para dirigirse al frente. (USIS) Trigve Lie (a la derecha) secretario general de las Nacio­ nes Unidas, entregando la bandera azul y blanca de la NU al embajador Warren Austin, representante de los Estados Uni­ dos en la NU, para su envío al general MacArthur (véase otra foto sobre el particular en estas páginas). (ÜSIS). El embajador Ernest A. Gross, representante de los Esta­ dos Unidos en el consejo de seguridad de las Naciones Unidas, estrechando la mano del Dr- John M. Changt embajador de la república de Corea en Norteamérica. En la histórica sesión del 25 de junio de 1950, Chang fué invitado aun no siendo miembro del consejo. (USIS), (6) Rindiendo su último informe.—El malogrado general de divi­ sión William F. Dean, (izquierda) rinde el último informe al te­ niente general Waitón H. Walker. Poco después de esto, Dean desa­ parecía misteriosamente. Ultimos informes revelan que fué cap­ turado por los rojos y bárbaramente asesinado a sangre fría. * (USIS) Del emocionante desfile de nuestros soldados que van a poner muy por alto en el frente de batalla sudcoreano, la enseña de Fili­ pinas, Aquí aparece el Presidente dirigiendo la palabra a la unidad del décimo batallón de combate* (Foto Manila Times), lamentar el Kremlin. En tér­ minos inequívocos, Lie dijo al consejo que era ‘claro deber” el dar los pasos necesarios para restablecer la paz en Co. rea. El tiempo apremiaba y el consejo, sabiéndolo, fué a caza de cada segundo, cada mi­ nuto y cada hora dé aquel me­ morable 25 de junio de 1950! Después de oir el informe d la comisión coreana que cal ficaba el ataque norcorean de “un acto de agresión injuí tificada sin precedentes,” < consejo aprobaba una resoli ción demandando el cese ir mediato de la lucha y la ayr da de todos sus miembros par la restauración de la paz. L Juegue Refrescada, O omese un Coca -Cola Sintonice con LA PAUSA QUE REFRESCA EN EL AIRE DZPI—los martes DZMB — los Domingos Embotellador autorizado LA FABRICA DE CERVEZA DE SAN MIGUEL resolución, adoptada por 9 votos contra ninguno, pedía a la vez a la comisión coreana que ayudase al cumplimiento de la orden de cese de fuego y a la retirada de las tropas agresoras y que cablegrafiase sin pérdida de tiempo a Lake Success sus ulteriores reco­ mendaciones. Acto seguido la comisión de Corea transmitía al consejo dos radiogramas. El primero decía: “La comisión está informa­ da de la adopción de la resolu­ ción del consejo apadrinada por Estados Unidos. Espera­ ba tal acción y expresa satis­ facción unánime por el acto. La comisión gustosa cumplirá la3 instrucciones del consejo tanque americano atraviesa una aldea en alguna parte del sur de Corea, dirigiéndose al frente de batalla. Centenares de tanques como estos han sido ya transportados al campo de ba­ talla coreano. (USIS) ‘ r El general Colimes (foto superior) estrecha las manos d° los americanos y sudcoreanos en uno de los frentes avanzados de gue­ rra en alguna parte de Corea del Sur. Abajo: un grupo de aviado­ res, mata las horas de ocio jugando a las cartas. (Fotos Af. Times) ¡Desembarque! En alguna parte de la costa coreana: Ominosa espera de un gigante de los mares. [8] pero desea advertir que sus esfuerzos para ponerse en con­ tacto con el Norte durante los últimos 18 meses hallaron res. puesta negativa/’ El segundo despacho decía: “El avance norcoreano ha creado una peligrosa situación con posibilidades de ulterior empeoramiento. Es imposible. visualizar la situación que existirá mañana en Seúl; x x x la comisión está conven­ cida de que los morcoreanos no han de prestar atención al. guna a la resolución del con-* sejo xxx el peligro está en que las operaciones críticas hoy en progreso pudieran con. cluir en cuestión de días y la retirada entonces de las fuer­ zas norcoreanás, sugerida en la resolución del consejo, re­ sultaría un mero gesto academico.,K Y a la vez la comisión, en vibrante apelación al pue­ blo entero de Corea instaba el cese de las operaciones y una reaproximación entre el norte En.un puerto oriental: Suministros para las fuerzas de las Naciones Unidas en Corea. Yongsang (2) que ha cam­ biado varias veces de manos, fué el eje de una de las más formidables ofensivas recien­ tes del enemigo rechazada con 10,000 bajas rojas y tremenda destrucción de equipos. Una di­ visión de fusileros navales (1) opera en el frente de. Masan mientras que los ñor coreanos huyen a través del rio Naktong (3). La histórica reunión del consejo de seguridad de las Naciones Unidas, €n la que por 9 votos 0 se hizo constar que la invasión del sur de Corea constituía una agresión y una amenaza para la paz del mundo. Así, las Naciones Unidas declaraban oficialmente la guerra a los comunistas norcorea. nos. (USIS) El general de división Hobart Raymond Gay, comandan­ te de una división norteameri­ cana que efectuó un desembar­ que el 18 de julio, cerca de Pohang, en la costa oriental de Corea. (USIS). Soldados y camiones norteamericanos desembarcando en la playa cerca de Pohang, en la costa oriental de la República de Corea. (9] y el sur por medio de repre­ sentantes autorizados. Dos días después la comi­ sión (integrada por Australia, China, El Salvador, Francia, India, Filipinas y Turquía) confirmaba sus temores ini­ ciales anunciando que los co­ munistas habían ignorado la orden de cese de fuego y de­ safiaban la autoridad de las Naciones Unidas. Convocóse inmediatamente al eonsejo de seguridad (a se gunda sesión) y se adaptaba dramáticamente, siempre con ausencia de Rusia, la siguien­ te resolución de la América del Norte: “Habiendo demandado un inmediato cese de hostilidades, “Habiendo apelado a las au­ toridades de Norte Corea para, que retirasen sus fuerzas ar­ madas hasta el paralelo 38, y “Habiendo observado por el informe de la comisión de las (Pasa a la p&g, 36) Teniente general Walton H. Walker, a quien se atribuye gran parte del crédito por ha­ ber detenido la retirada ameri­ cana que amenazaba ya dege­ nerar en loca desbandada. Una fogosa arenga detuvo la retira­ da' cerca ya de Pusan, el último reducto que le quedaba al ame­ ricano y que asumía entonces las trágicas perspectivas de uva nueva Dunquerqué. (USIS). Jacob A. Malik, d legado soviet al consejo de seguridad de las Naciones Unidas de pie, ha­ blando y tratando de defender.su resolución (que fué rechazada) de oue la NU reconociese a la “república” roja de China y buscase un “arreglo pacífico” del conflicto coreano (USIS) Técnicos r orteamericanos examinan el tanque ruso T-34 comparándolo con tres tipos de tanques americanos. El tanque ruso es superior a los tanqzies Sherman y Persing pero inferior al nue­ vo tanque Patton que pesa 48 toneladas, lleva cañones de 90 mm, y tiene una velocidad de 35 mi­ llas por hora. (Foto Marúla Times) El vicealmirante Arthur D. Struble, comandante de la séptima flota de los Estados Unidos despachada por el pre­ sidente Truman a las costas de Formosa para impedir una in­ vasión comunista china, (USIS). CIO] TRABAJOS ARTÍSTICOS DE HIERRO FORJADO LÁMPARAS PARA IGLESIA—MESA Y SILLAS PARA JARDÍN MACETEROS-FAROLES-VERJAS etc., etc. GUERRA... (Viene de la pág. 10) ñones Unidas en Corea que autoridades de Norte Coni han cesado las hostililes ni retiiado sus fuerzas ña el paralelo 38 y que se requieren urgentes medidas militares para restaurar la paz y la seguridad internado, rales, y “Habiendo tenido en cuenta la apelación hecha por la Re­ pública de Corea a las Nacio­ nes Unidas para que se den pasos efectivos e inmediatos tendentes a asegurar la paz y la seguridad, “Recomienda que los miem­ bros de las Nadones unidas rindan la ayuda que sea nece­ saria a la República de Corea con el fin de repeler la agre^ sión y restaurar la paz y la seguridad internacionales en. esa parte del mundo”. El President Harry S. Truman en términos inequívo. Némesis de los tanques rojos.—La nueva “bazooka” de 3.5 pulgadas, lanza, llamas y eléctrica. Pesa ocho libras y emplea municiones mayores. Fue uno de los principales factores en la serie de victorias americanas. (USIS). Otro momento histórico.—El general J- Lawton Collins (iz­ quierda) haciendo entrega de bandera blanquiazul de las Na­ ciones Unidas al General del ejército Douglas MacArthur, com­ andante en jefe de las fuerzas de las Naciones Unidas en Corea. (USIS) Uno de los howitzers de 105 mm. es sometido a cuidadosa ins­ pección por técnicos bajo el coronel Benjamím Molina. Estas ar­ mas serán usadas por la unidad del décimo batallón de combate filipino en Corea* (Foto Manila Tmes). f 86 1 misión para que labore (Pasa a la pág. 40) la tropas El teniente coronel Mariano C- Azurin que manda de la 24.a división en acción en el manipula un hoivitzer de 105 mm. Soldados afroamericanos frente coreano. Este grupo (USIS) eos, denunciaba a su vez agresión comunista y respon­ diendo a la petición de ayuda contenida en la resolución adoptada por el consejo de se­ guridad de las Naciones Uni­ das, anunciaba en dramático momento.: “x x x he ordenado a las fuerzas americanas del aire y del mar que concedan todo el apoyo posible a las del gobierno coreano. “x x x El ataque a palpablemente indica Corea. rrwoRtH como Este cuadro, descansando en cuatro puntos vitales: Filipipinas, Hawaii, Dhahran y Azores, constituiría, en caso de una guerra en el Oriente, un marco de defensa norteamericano, con el Ft. Worth como base madre de refuerzos y suministros. Lavando la guerra a la espalda’.—Lscenas ordinaria^ en el sur de Corea. El soldado de la izquierda porta tina “bazooka”, mortal enemigo de los tanques rojos y el de la derecha lleva a la espalda un lanza llamas. (Foto Manila Times). Pacífi:o y a las fuerzas de los Estados Unidos que en dicha zona están desempeñando sus deberes legales y necesarios... “Por lo tanto he ordenado a la séptima flota que impida un ataque a Formosa. Como corolario de esta acción, insto al gobierno chino en Formosa que cese toda operación por aire y mar contra el territorio de China. comunismo ha rebasado el uso de la subversión para la con­ quista de naciones indepen­ dientes y que ahora empleará la invasión armada y la gue­ rra^ Ha desafiado las ordenes del consejo de seguridad de las Naciones Unidas para la con­ servación deria paz y seguri­ dad internacionales. “Bajo estas circunstancias la ocupación de Formosa por las fuerzas comunistas consti­ tuiría una amenaza directa a la seguridad de la'zona del “También he instruido que las fuerzas de los Estados Uni­ dos en Filipinas sean reforza­ das y que se acelere la ayuda militar ai gobierno de Filipi­ nas. “También he ordenado se acelere la concesión de ayuda militar a las fuerzas de Fran­ cia en Indochina y envío de una la uni­ dad de combate filipina que luchará (.n Coreo. En la foto Azu­ rin aparece explicando al teniente coronel Benjamín Molina (derecha) jefe de artillería, lo que necesita su unidad. En el centro aparece el comandante Gamaliel L Molina. Manila Times). [87] LA GUERRA... (Viene de la pág. 37) onjuntttmente con dichas uerzas. xxx x” -----OQO---La invasión del sur de Coea fué un golpe premeditado n medio del mayor secretisrio y la más desvergonzada avilantez. Un informe de la lomisión coreana decía que el égimen comunista de No reoea estuvo entregado a una descarada propaganda” y 'gestos amenazadores” y “ac. tivídades subversivas”, todo tendente a debilitar al gobier. no de la República de Corea. Esa actitud tenía por fondo un objetivo claro: apoyar las actividades subversivas de los elementos rojos en Corea. Con­ tinuos encuentros en la impro­ visada “frontera” del paralelo 38 estuvieron librándose por espacio de dos años, negándose obstinadamente Norcorea a admitir la intervención de la comisión de las Naciones Uni, das expresamente destinada a Corea. ¿Qué es la línea divisor:a del paralelo 38? De ninguna manera una “frontera” que divide Corefe en dos estades independientes como Rus:’a trató y trata de considerar. Fué solo una medida provisio.. nal adoptada para facilitar la rendición de los japoneses que ocupaban el vasto territorio coreano. Con el fin de apre­ surar la tarea de la rendición cargándose los americanos la parte sur. Completada rendición, Rusia con rnan ávidas-, dejo caer sobre la Un del paralelo 38 el fatídico lón de acero, cerrando la nií tad de Corea y sumiéndola el más profundo secretism que ni las Naciones Unida lograron descorrer. Todas tentativas que se hicieron liaron el más rotundo iracas De este desafío a su autori­ dad. las Naciones Unidas desquitan hoy alistando baj Soldados americanos y sudcoreanos se unen y forman una patrulla de exploración para la 25-a división de infantería en alguna parteado Corea. (USIS). japonesa, se decidió trazar una linea imaginaria en el parale­ lo 38 dejando a Rusia encar­ gada de la capitulación nipona en la parte norte del país y en­ dos cautivos ñorinterrogar do a Uno de los gigantescos portarían es norteamericanos salien­ do cierto puerto de los Estados Unidos con su cubierta lleva aviones, para dirigirse a .alguna parte del Extremo Oriente. do de (USIS). Un intérprete sudcoreano coreanos rojos cerca del rio Kum. (USIS) su bandera azul y blanca a dos los países que militan jo la égida de la paz. Y ent estos países, entre los prim ros, figura Filipinas. Desa grada, aún en ruinas, todav humeantes los que fueron ca pos de batalla y encendida au la hoguera de la guerra en seno, no vacila en ofrecer cin co m'l soldados, la flor v nata de su ejército, a la causa de democracia. El primer confia gente de estos- cinco mil sold dos, 1,200 ' hombres bajo mando del teniente coronel zurín, han salido o van a sal de un momento a otro (es secreto militar su partid^ Van a Tokio y de aquí a Coré totalmente equipados y dueñ de un entusiasmo y un anhe de lucha que recuerda la [40] El senador norteamericano Theodore Fr antis Green, de Rhode Island, miembro del co­ mité de relaciones exteriores del senado y una autoridad en cuestiones coreanas- Fué autor de los dos artículos “The Soviet Pattern in Korea” (el padrón' soviet en Coread . (USIS). peya de Bataan, Lingayén y Corregidor. Un periodista irresponsable habló de desani­ mo entre estos hombres hon­ rados con la misión de enarbo­ lar la bandera de su patria en el frente de batalla de Corea. Y un oficial irresponsable ha­ bló de falta de preparación con pesimismo de paria. El mentís más rotundo para los dos ha 3Ído el desfile de la unidad ex­ pedicionaria el 2 de este mes, en el Rizal Memorial Stadium. El entusiasmo y la emoción en cada rostro atezado ha sido la más grandiosa manifesta­ ción de ardor patrio, de disci­ plina y de hidalguía que ja­ más han podido verse mejor retratados en rostro humano. Y entretanto en Corea Mar­ te con su séquito apocalíptico recorre el sur, devastador* in­ trigante, impiadoso. Cambian de manos ciudades, pueblos y aldeas. Caen Dor millares in­ vasores n invadidos. Brilla un día el sol para la bandera azul Bar Barrueco --- o--El Bar donde encontrará a cualquier hora un ambiente español. Bilibid Viejo 1017. y blanca de la libertad, la her­ mandad y la paz y al otro para la sangrienta enseña de la hoz y el martillo, el signo de la es­ clavitud, la negación de la li­ bertad y de Dios y la consa­ gración de la hegemon a mun­ dial soviética. Pero el final no e's difícil de predecir. Ante los ojos cons­ ternados del mundo, —el mun­ do democrático porque el sa­ télite del soviet los tiene cerra­ dos—cayeron en día trágico Seúl, Siuwon, (jhungju, Taejon, Taegu, Pohang y en un rinconcito de la Corea el con­ fín, Pusan se bamboleó trá­ gica. Pero Pusan hoy se ha salva­ do. Y Pohang ha sido libera­ da. Y todos sabemos, con la confianza puesta en Dios y en la Causa, que los resplandores de la libertad pronto se harán otra vez, en glorioso viceversa, en Taegu, Taejon, Chungju. Suiwon, y al fin Seúl no como sector 8ip* cuaftdo las tropas comunistas norcoreanas ame­ nazaban a Taegu desde tres puntos vitales marcados por los números(Foto Marila Times). remate Seúl, sino como inicio de la unificación de Corea, una Corea soberana, dueña de su destino 7 monumento impere­ cedero de la Democracia! NOCHE DE MARZO (Conclusión) —¿Qué vas a hacer? —pregunté • ulia. ansiosa. —Rajar y llamar al primer poji -ia que encuentre, para hacerlo en trar. Siempre hay un agente en la equina. Se encaminó hacia la puerta; Jn lia se colgó de su brazo, nerviosa. —I La policía no; no! ¡No me dejes..., no te vayas!... Mario no cesaba de mirarla. Es­ taba hermosa, más hermosa que nun­ ca en «u desesperado dolor. La apar­ tó con dulzura, y en el tono que «e usa para hablarle a una criatura, a una pobre niña sin defensa, dijo a sí .• — No es' necesario que haya® «ido tú quien mató a ese hombre. Puedo naher «ido yo. —rTú! — Pues, claro, yo. por celos. Dé iame hablar..., me acusaré. ¡Diré que lo maté por celos! La lluvia caía con rumor monó tono Mario hablaba siempre; cuan do Julia . pretendía interrumpirlo le cerraba la hora con la mano. © —Por celos, naturalmente. ¿Qué tiene de extraño? Celos venjzati VOS... —¡No. Mario’.., ¡No, nor — ¡Yo te digo que sí! ¿Quién te llevó a esta vida? Yo...: por con­ siguiente tengo que pagarlo Julia se resistía; entonces él le habló con rudeza. —No bagas locuras. Y recu bien todo lo que voy a decirte^ abriste la puerta y yo entré... __ otro me amenazó..., nO9 tren/aml Yo le quité el revólver.... ecpe' ¿el revólver es tuyo, no? El né llevaba armas... —corrió al saloncito, se inclinó sobre el hombre, lo palpó, lo registró y volvió dici*»n ¿o—: No. no tenía revólver; enlon ces éste es el suyo, no lo olvide* Yo se lo arranqué de las manos. Colocó el arma sobre la alfombra y se incorporó otra vez. —Habla lo menos posible delante de la policía. Finge estar aterrori­ zada. Y después durante el juicio. . —tuvo fuerzas para reír y hacerle unas caricias—. ¿Qué estás pensan­ do? Unos años de cárcel..-. « lo mejor ni eso: depende de cómo lo tomen. Así te salvo; no habrá con­ dena para ti. La mujeT quería hablar pero él le tapó la. boca. —¡Cállate! 'No perdamos tiempo. Se separó de Julia que lo suje­ taba aún. E’la se enloquecía ante la idea de quedarse sola con el ca­ dáver. Pot fin él logró desasirse.^ —¿Y tú..., tú? —A mi me pondrán preso Pero todo saldrá bien. Habla lo menos posible. Deja lo demás a mi cargo. Todo saldrá bien. Lo más impor­ tante es no despertar a los vecinos. Figúrate qué alboroto armarían... Se escurrió afuera; cerró la puer­ ta suavemente; bajó la escalera con paso de gato; dejó e) portal entor­ nado y, corriendo, se dirigió • la plaza. Ya no llovía. En eJ cielo brillaban algunas estrellas. [41] # Alfredo Vanni