El Misionero

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Title
El Misionero
Description
Revista dedicada a Santa Teresita para la Propagacion de la Fe en la Provincia Montanosa
Issue Date
Año I (Issue No. 7) Diciembre, 1926
Publisher
Catholic School Press
Year
1926
Language
Spanish
Subject
Catholics--California--San Francisco--Periodicals
Hispanic Americans--Religion--Periodicals
Rights
In Copyright - Educational Use Permitted
Place of publication
Baguio
extracted text
AÑO 1, No. 7 DICIEMBRE J926 JtEVISTA- DEOICAOA-A-SANTA-TERESl - TA- PARA-L-'" PROPAGACION DE ·L~ FE EN l~ PROVI NCI~ MONTANOSN Catholic School Press, Baguio, Prov. Montañosa, I. F. € 1 mis 1on~ro (Jr[[ano de los Misio1zeros del Saf{rado C1razón de 11/aria (PP. ,fr S',-f1e11.') eu /,i pro¡J/11cia ll1011!a1!osa, islas Fi!ipiuas Editor - RDO. OCTAVIO VANDE\VALLE, P. O Box 1393. Manila. Administrador - RDo. P. VICTOR FANIEL, P.O. Box 1393, Manila. Pnb:idstas C . .\.THOLIC SCHOOL PRESS, Baguio, Prov. Montañosa. Suscripción Anual ~ fD 1.00 Filipinas $ 1.0) E. Unidos y otros Países Extranjeros Sírvanse notificar iirnediatamente a ·'EL MISIONERO" cualquiet! cambio d~ dirección. Todos los cheques, giros postales y correspondencias se enviarán a~ "EL, MISIONERO" P. O. Box 1393, Manila ISLAS FILIPINAS Pequeño Catecismo lle la DOCTRINA CRISTIANA PJ.40 por 50 ejemplares P2.50 el ciento con el gasto del correo Mandese el importe con el pedido a CA THOLIC SCHOOL PRESS PACK ROAD, BAGUIO· J{ñ()-i, No. 7 Diciembre 1926 El Misionero Revista dedicada a Santa T ereaita para la Propagación de la Fe en la Provincia Montañosa r"· ..... ...... .. ...... ,, ...... "'"" ., ... - ........ _,,, ............. ,. .... , ¡ 1 I. ''Gloria~ :~:,~k~:ura~:::::~a ¡,, =1 bres de buena voluntad," es el mensaje celestial que anunció ~ 1 , ~~/~v:,;.i:~i;;;~~o ~~~:c;::;'Jd.Y ~:ae~.:;:~:p:l~:;,,d:~r;~ I· tit:rra, ¿que es, si no nuestro reconocimiento de las infinitas peifecá'ones de Dios: de su omnipotencia, por nuestra fiel l sumisión a su santa volimtad; de su otmziciencia, por nuestra ¡• fe ciega en sus palabras; de su amor insondable, por nuestra tirdienle caridad; de su ilimitada grandeza, por nuestra constante kumildad; de su omnipresencia, por la modestia de 1 nuestra conducta,)' de su santidad, por la práctica de todas 1 1 las virtudes? ·En una palabra, la gloria de Dios en la tierra, no es, sino el reconocimiento de la nada de nuestro ser, de ntiestros pensamientos, deseos, palabras y acciones, comparados con lo infinito que Dios es, para todos y cada uno de noso¡ Iros, expresados por nuestra humilde sumisión· a su santa ! vo~;':e~: que durante stt estancia en la tierra procura esta · l , gloria divina, ka encontrado, sin duda alguna, la verdadera 1 paz y el Cielo anticipado en este valle de lágrimas. En vano ;I buscaremos la paz fuera de Dios: primero, porque lejos de Él y sin Él, no hay paz con Aquel que un dfa será' nuestro Juez, l .. y segundo, porque fuera de Dios, no kay mas que criaturas, '1 1 todas y cada u1za de ellas egoístas para su conservación y procurand.J siempre us1trpar nuestros dereckos, lo q'ue indudable~.... D•''""'ª"'ª"'ª"'""'"'"'""ª"'"'""'"'ª"'&J"'"'o;"'"''"ª"'"'• ª'""'"'"''""'"'J 194 mente perturba, si no de.rtroza, nue~tra propia paz, tambien egoista. Gozar de la verdadera paz y·dár gloria a Dios, son sinónimos. /Paz! ¡paz a vosotros quert'dfsimos lectores! Pai, si, pero paz en el verdadero sentido de la palabra! Esa paz significa: felicidad, aun en medio de la tristeza; alegria, aun bajo la carga de la ctuz cotidiana; esperanza, aun en el más rudo combate contra los enemigos, porque es1a paz significa Diós en y con nosotros; significa .Dios para nosotros por toda la eternidad. ¡Que tal sea vuestra paz, ahora. más tarde y siempre!: este fué el mensaje celestial de los ángeles a los pastores de Be/en. Y para que esta paz Sfla la vuestra, nosotros. los misioneros de la provin'cia Montañosa ofrecemos nuestras plegarias a Dios y os prometemos que la pediremos mas que nunca 'ylara vosotros, en la Nochebuena. Esa vuestra paz procurará a su vez la paz entre los paganos que la ignoran y así nos a; udará a procurar la gloria de Dios allá donde hoy solo se honra a Satanás. Los Misioneros de la Provincia Montañosa. Ante La Muerte (A la memoria de mi-dilecta y malograda amiga Pilar Lopez de Locsin, fallecida recientemente en esta ciudad) Con furia de cicl6n flino la Parca y devast6 el trigal de tu existencia, al modo de un ladr6n que, con violencia, se apropia lo mejor que guarda el arca. A cuanto mereciste, a todo abarca el aj ecto que supo con vehemencia despertar en la tierra tu Presencia, cuando él mar del vivir surc6 tu barca. Marcha en paz en las sombras del misterio que existe más allá del cementerio, donde el alma se queda en libertad. Donde no hay las coronas con espinas y dor.de muy segura al fin caminas con luz del Infinito y la Verdad. J. F. A. Iloílo, Oct. 1926. El Hombre llL CAER LA TARDE, el hombre malhumorado sentóse delante de la ventana cerrada. Solitario se hallaba en su ca!'a como solitaria era tambien su vida. Desde la bóveda del cuarto una lamparita eléctrica que en su rnledad se divertía soñando en sus muchas hermanas que irradiaban sus brillantes luces multicolores en mesas regias, en espejos fantásticos, en vestidos lujosos y en los ojos de las multitudes embebida~de placer, mirábale pacíficamente. Lejos de sus hermanas, muy sola se encontraba ella allí en aquel cuarto herméticamente cerrado, ell compañía del hombre malhumorado que frente a la ventana cerrada soñaba; más no se quejaba de su soledad. Ni siquiera pensó esta noche en apartar de la mente de su dueño los pensamientos tristes que parecían preocuparle; bien sabía ella que todo sería en vano pues repetidas veces desde hacía ya mucho tiempo había intentado hacerlo y sus esfuerzos siempre se vieron frustrados. Aquella noche, el primero de Diciembre, la lamparita vió con asombro que el hombre malhumorado ni siquiera se había tomado lamolestia de encender un cigarro. Un buen tabaco es un excelente compañero en la soledad, pero esta noche el hombre malhumorado no quiso tener ni siquiera este consuelo. Deseaba estar solo .... solo 195 Malhumorado con sus pensamientos lóbregos .... sombríos .... solitario pues se encontraba .... Pero no .... Delante de él, a sus pies, sobre el suelo brilloso, aparecían por momentos dos rayos opacos de la luna que decuando en cuando atisbaba por dos conchas rotas. Negras y densas nubes, arrastradas por el rugiente viento, cruzaban por-oceanos de lluvias torrenciales que de vez en cuando se paraban por un momento, como para dar a la reina de la noche una oportunidad mas de ojear al mundo mentecato y al hombre malhumorado. Pero el hombre no oía los quejidos y silbidos del viento, ni se daba cuenta de los repetido;; chubascos, ni del estampido del lejano trueno. Fija tenía la mirada en el suelo donde las momentaneas apariciones de los dos rayos de luna jugueteaban, y, atento, escuchaba las voces melancólicas de su alma y de su conciencia .... estaba malhumorado .... Una vez más los dos rayos de luna miraron sus labios comprimidos y su cara desfigurada. El hombre malhumorado hizo frente a las dos bolas de fuego .... clavó en ellos intensamente su mirada ... .les miró con ojos de fiera ..... ¿que es lo que allí pasaba.? .... Las dós bolas rojas se movieron, se contrayeron, se dilataron, se levantaron .... y .... he 196 aquí que llegaron a rns pies: habían tomado la forma de un ser humano, con cabellos desgreñados .... envuelto en un tétrico manto. Un momento más y del espectro lúgubre no se vió sino un par de chispas de fuego ... .los ojos ardientes que al principio notara debajo de las dens· simas cejas de la deforme. cabeza del espectro .... estas dos chispas encendidas estaban ahora fijas en el hombre mall0 umorado. -¿Quien eres?-gritó espantado. -Soy el espíritu de Diciembrecontestó el espectro.-Responde, ¿bajo que apariencia quieres verme hoy? Igual a un pagano como en años pa-:ados o igual a un cristiano como siempre hubiese aparecido aquí, si tu no hubieses olvidado tu bautismo? -Quiero verte primero como un pagano-suspiró el hombre malhumorado. La aparición no contestó, pero su cara se hizo distinta y vigorosa; una carcajada salvaje la desfiguró horrib)emente. Esta carcajada era larga pero hipócrita evidentemente. La avaricia y la lujuria brillaban en los ojos del espíritu; la envidia y el odio gruñían en sus labios, muchas otras pasiones degradantes e-staban escritas en su figura. Despacio prosiguió su discur~o: -Yo s y Diciembre, el Diciembre pagano de los ricos! Desde la mañana hasta la noche, y desde la noche hasta la mañana, estoy ocupadísimo conmigo mismo. M e engalano con vestidos lujosísimos; bebo mucho y como con abundancia. Ilumino los salones regios p~­ ra léJs reuniones y festividade5; brillo en las alhajas de las mujeres y en los ojos devoradores de los hombres; derramo oro en abun· dancia en las arcas de los comerciantes y de los ocupadísimos brindadores de placeres, que bien veo no llega a las huesudas y temblorosas manos de los pobres y miserables. Y o soy la alegría de las noches largas, ¿no me reconoces? -Si, te reconozco-suspiró el hombre.-Y es por culpa tuya que esta no he esté triste y malhumorado. -Espera un poco-interrumpió el espectro-contemplame ahora como el Diciembre pagano de los pobres ! .... pero no .... porque el paganismo del rico produce el paganismo del pobre; ambos van juntos haciendo una compañía perfectamente proporcionada. Mira mis ojos. ¿Ves en ellos esta llama? ¿La reconoces? Sin duda alguna, porque, tu la viste en las caras demacradas de la gente pobre abandonada, des~ preciada. Es la llama de la envidia. Mira como cambia de forma y se convierte en las tinieblas del menosprecio, en odio infernal que crecerá y se com·ertirá en un terrible volcán que algún día explotará para destrozarlo todo. Mi risa es comprimida .... y así parece más extraña y horrible: es el eco de innumerables maldiciones! En este momento el espectro tiritó y tosió ... .la casa entera tembló .... pero el espíritu prosiguió: -Este escalfrío, esta tos, este estremecimiento de la casa son las eternas execraciones de las almas . . ... de tus cor.1patriotas paganos de la Montaños1, perdidas para siempre .... son las maldiciones de un Dios hecho hombre contra aquellos cuya vida pagana y ruidosa filantropía han olvidado y perdido estas almas desesperadas, malditas por toda una eternidad. ¡Escúchame! .'\fuera el viento seguía rugiendo un cántico horrible de amenazas y blasfemias. -¡Apártate!-gritó t 1 hombre malhumorado. ¡Quítate que me espantas! Pero el espíritu permaneció inmov-il, sin retirarse ni una pulgada. Por tercera vez cambió de forma. Las chispas de sus ojos de fuego se empañaron un tanto y estos tornáronse hermosísimos como los ojos puros de una inoce11te criatura. La boca cesó de contraerse y una sonrisa angelical :;:e dibujó en. sus labios, mientras que un perfume celestiai llenó el cuarto, ahora brillante con rayos de gloria. Parecía que en el aire revoloteaba un espíritu de paz y alegría. --Soy el Diciembre cristiano, susurró la voz misteriosa, ahora igual al murmullo de una oración.-Yo sov la alegría del verdadero hogar y de las fiestas que se dan en honor de Dios y para el alivio de Jo:; pobres. Ilumino las iglesias por las maña - nitas y durante la misa de Nochebuena. Acompaño al alma CJritativa en sus visitas generosas y entro con ella en las casuchas de lo~ miserables en donde enciendo de nuevo la llama del amor y de la esperanza y el espíritu de resignación y confianza. 197 Soy la voz de los Misionero~ mendigando ayuda material para construir el camino que conducirá al Cielo miles y miles de infieles en tu provincia Montañosa. Estoy al lado de estos Apóstoles en los profundos valles y ele' ada!< montañas; enjugo sus caras sudorosas y sostengo sus fuerzas desfallecidas mientras construyen iglesias y sostienen escuelas. Junta mente con ellos, estoy al lado de los enfermos y los moribundos. No tengo mas que una sola cara para el rico y para el pobre, porque mi cara contempla a Dios tan to en el pagano como en el cristiano; soy la Caridad cristiana .... -Basta-dijo el hombre malhumorado. -Tú consuelas mi corazón. Tú debes ser mi fiel compañero. Desde ahora te seguiré. -Ven--,-dijo la aparición. * * * El hombre se despertó, abrió la dormida lamparilla que ahora ya no reconoció a su dueño; tan cambiado estaba. Y entonces el hombre, mirando a su alrededor, vió en la mesa "EL MISJONERO;" hojeó la revista, escribió una carta, incluyó en ella algo azul sacado de su arca, la puso en un sobre, y, habiendo tomado s 1 porramonedas, bajó a la calle. Depositada la carta en correos, entró e11 la casucha de una pobre viuda, madr~ de cinco hijos hambrientos. Y desde aquella noche. el hombre, antes malhumorado, tiene "'iempre una sonrisa en los labios y fa verdadera paz y a'egría en su corazón. SAVO:-<AROLA 198 Dic. 29, Santo Tomas de Canterbury Nació Santo Tomas, hijo de Gilbert Becket, en Southwark, Inglaterra, el año 1117 A. D. Durante su juventud sirvió en el palacio de Teobaldo, Arzobispo de Canterbury, quien 1'~ mandó a Paris y Bolonia para estudiar el derecho. Fué nombrado Archidiácono de Canterbury, despues Canciller de Inglaterra, y, en 1160 cuando murió Teobaldo, el Rey Enrique IJ insistió en hacerle su sucesor. Pero Santo Tomas rehusó, advirtiendo al Rey que de aceptar el cargo cesaría desde aquel momento la amistad que los unía. Al fin consintió y fué consagrado Arzobispo. El conflicto surgió enseguida: Santo Tomas rehusó acatarse a las costumbres reales que violaban los derechos y las libertades .:le la Iglesia y las leyes del reino. Despues de una contienda de seis años, la mayor parte de ellos pasados en destierro, Santo Tomas, sabiendo muy bien que iba a exponerse al martirio, resolvió, como un. Buen Pastor, volver a su rebaño, a su Iglesia. El 29 de Diciembre de 1170, en el momento de comenzar las vísperas, cuatro caballeros entraron en la catedral gritando: "¿donde está el Arzobispo? ¿Donde está el traidor?" Los monjes huyeron y Santo Tomas con toda facilidad hubiera podido hacer lo mismo, pero, acercándose a ellos, les dijo: "Aquí estoy, no un traidor sino el Arzobispo. ¿Que es lo que queréis?" -"Tu vida" exclamaron. "Con gusto os la doy" contesto el Santo e, inclinando la cabeza, el invencible mártir fué herido y despedazado ha;;ta que rindió el alma a su Creador. · Seis meses despues, Enrique 11 consintió ser públicamente flagelado en el santuario del Santo, devolviendo al mismo tiempo a la Iglesia todos sus derechos. "Aprended de Santo Tomas, dice el P. Faber, a luchar el buen combate aun a costa de vuestra sangre, o, lo que parece más dificil para un hombre, aun a costa de vuestro nombre por la buena causa." El silencio de los católicos, a la vista de las injusticias cometidas contra los derechos de Dios y de su Iglesia, anima a los enemigos de Dios, no solamente a continuar sus abusos. sino tambien a aumentarlos y reforzarlos mas y mas. Hay un silencio que parece una aprobación. Unos cincuenta legisladores, al hacer leyes injustas, son muy culpables, pero los millares de compatriotas suyos tambien lo son, al menos por su silencio aprqbador. ':·?f!·.· 199 De los Labios de los Sabios 81. Al gallo que canta, le aprietan la garganta. 82. Despues de beber cada uno dice su parecer. 83. El can de buena raza, siempre ha mientes del pan y la caza. 84. No es mucho que a quien te da la gallina entera, tu des una pierna de ella. 85. A quien te dá el capón, dale la pierna y el alón. 86. Ceño y enseño, del mal hijo hacen bueno. 87. De tal barba, tal escama. 88. Hijo de viuda, o mal criado o mal acostumbrado. 89. Lo que en la leche se mama en la mortaja se derrama. 90. El verdadero huérfano es el que no ha recibido. 91. Ea, sus, y traga el avestruz. 92. Cara y cuentas de beato, y uñas de gato. 93. Decir mal de las cartas y jugar dos barajas. 94. Detrás de la cruz está el diablo. 95. La cruz en los pechos y el diablo en los hechos. 96. De quien pone los ojos ~n el suelo no fies tu dinero. 97. El rosario en el cu~llo y el diablo en el cµ.erpo. 98. Al capón que se hace gallo, azotallo. 99. Como el gallo de Morón, cacareando y sin plumas. 100. Quien te hace fiestas que no te suele hacer, o te quiere· engañar o te ha menester. 200 ~·~~~f 41 ~ La Misión K- 1t ~ J ~···~···~·~ ........... t Una Carta del Hermano Eduardo Misionero en Lubuagan. Cuatro Semanas en Naneng entre los Kalingas ( Continuaci6n) QUELLA MISMA NOCHE cené en casa de Banarnn. Nuestro menú rezaba: morisqueta en abundancia, langostas, sal y hojas de camote. Siendo el huesped de la casa, comí el primero y luego hube terminado, toda la familia se sentó en el suelo, es decir a la mesa. Terminada la comida, la dueña de la casa limpió cuidadosamente los platos, y los colocó en orden perfecto sobr~ una tabla, fijada a la pared, en donde formaban el único adorno de la casa. Y ahora a casa de Mandia. ¿Encon t1 aría allí a los niños? ¿Serían fieles a su promesa? Encontré la casa llenísima de niños y niña~ dos hombres y algunas mujeres. No había entrado aun en la casa, cuando Mandia me pidió que rezara con e:los el rosario a fin de enseñar a los niños y niñas y a todos los allí presentes esta devol·ión. Confieso que estaba un poco turbado, porque no conozco perfectamente el dialecto Ilocano .... pero, encendí dos velas, cogí un catecismo y recé el rosario leyendo las oraciones del libro. Que el rosario se rezó sin ninguna distracción y con mucho fervor, no lo puedo garantizar porque la congre· gación no ent.endía aun lo que allí sucedía, así es que no era de extrañar que se oyera de vez en cuando el principio de una conver· sación, cortada inmediatamente por la voz imponente de Mandia. Despues del rosario, Mandia quería la oración con los nombres de todas las vírgenes. Y o estaba perplejo y no acababa de compren· der cual era esta oración que por primera vez en mi vida oía men· cionar. Un joven intérprete me hizo comprender, que Mandia se refería a la letanía de la Virgen. De nuevo me puse las gafas y juntos la rezamos. "¿Hemos terminado ahora?" Todavía no, pues 201 Algunos de los alumnos adultos del Hno. Eduardo Mandia quería un canto. Canté pues la "Salve Regina ;" estaban tan encantados que me pidieron un canto mas y yo, para darl\'s por el gusto entoné el "Adeste Fidelis." ''¡Uno más! ¡Uno más!" gritaban todos. Las oraciones y los cantos de aquella primPra noche duraron hasta a las 10:30, hora en que Mandia mandó a todo~ los presentes que se retiraran, orden que obedecieron aunque de mala gana. Estaba per;:uadido que los presentes se rerirarían más temprano la próxima noche, puesto que la reunión de la noche anterior había durado <lemas ado. ¿Pero podéis creerlo? "El apetito viene comiendo" di!=e el refran que una vez más se verificó aquí. porque, en las reuniones siguientes, no solamente aumentó el número de los concurrentes sino tambien hasta el ardor de prolongarla<. Estaba la casa qu~ no cabía ni un alfiler: los que no encontraron lugar adentro hicieron sus devociones ahajo. A las 10 p. m. ya podía yo decirles que estaba cansadísimo. parecían no comprenderme o rehusaron creerlo. Cierta noche, despues de las oraciones y. de los cantos, tuve la locura de exhibir algunos juegos de manos que había aprendio en mi~ años mozos de un viejo prestidigitador. Excitó tanto esta exhibición la curiosidad tanto de los ~ncianos como de los niños, y creó un entusia;;;mo tan delirante, que, despues del primer juego, gritaron todos pidiendo uno mas y despues otro mas y mas y mas y mas .... hasta constituir un programa entero que duró hasta la media. noche, y así sucedió cada noche: despues de las oraciones de costum202 Algunos de los pequeños alumnos del Hno. Eduardo ore, y habiendo explicado algún punto <;le doctrina, tuve' que exhibir todo los juegos de mano que conocía e inventaba; pero si los niños me cogieron: a mí, yo tambien les tenia cogidos, porque poseía un medio muy efical para lograr que se estuviesen quietos durante las oraciones y la lección: "porque si no os estáis quie1os y no atendéis bien a lo que yo digo, no tendréis función", en vista de lo cual hasta los mi!'mos ratones no ·se movían. Lo que me sirvió tambien para estrechar más nuestros lazos de amistad, fueron algunos bizcochos que llevaba en mis baules y qtie por cierto no eran muchos; sucedió que, para poder distribuir entre tantos, tuve que partir algunas veces un solo bizcocho en cuatro partes, para que así cuatro niñas o niños contentísimos pudieran decir, que habían probado un bizcocho. ¡Que felices eran! Si hubiera tenido. más bizcochos, más alumnos hubieran atendido a mis lecciones, porque, si es que he dicho que no hay más que siete casas en el centro de Naneng, hay muchísimas más a cierta distancia y la población de la aldea llega a unas quinientas almas. Fieles a sus promesas, la gente, el día despues de mi llegada. trajo ya algunos pedazos de madera, así es, que pude empezar la construcción de la primera capilla en este retirado rincón. A las 10 a. m. viene una.verda~ dera sorpresa: Limangon no5 trae una gallina bien cocida y morisqueta más que suficiente para esperar la hora de la comida que será entre 11 a.m. y 1 p.m., porque Mandia va a sus campos cada mañana y es algo irreg_ular en volver para prepararla. 203 he puesto debajo de cada uno una medalla bendecida de la Virgen, San Benito, San José, la Florecita, San Huberto y San Antonio. He aqui que a las 6 p. m. estan levantados los primeros seis postes de la capilla: para asegurarlos contra el <lemonio y sus asechanzas, Civismo y Fe Las leyes democráticas que hoy rigen los destinos del pueblo filipir.o, podrían ser un áureo vellocino si dieran algo más de lo que exigen. Legisladores hay que no se afligen de ver, en lo moral, por mal camino al Pueblo que a la ruina va, sin tino, con la calma de cuantos lo dirigen. (Se continuará) Apercíbete, oh, Pueblo! de tu estado, y con tesón rechaza a los mandones Profesor: que empujen tu bajel hacia un naufragio. No dudes de que Dios irá a tu lado si, al llamarle con fe en tus oraciones, con civismo ejercieras el sufragio. J. F. A. Iloilo, Nov. 1926. -·De Buen Humor -Vamos a ver, Arturito, usted que es el más haragán de la clase, me va a hacer una composición titulada los efectos de la pereza. Al cabo de una hora, Arturito le presenta una hoja en blanco. Al ver esto el profesor le dice: -¿Y esto que significa? -Los efectos de la pereza-contesta Arturito. 204 De la Misión Tambores ... lo suficiente para un baile entre la gente de la Montañosa Bauco~ El P. Van Zuyt escribe: los pri meros días de mi llegada a este pueblo, nadie, pero absolutamente nadie, a excepción de mi,. acóli1 o·, :iía misa. En cambio ah.ora, de sesenta a setenta fieles asisten diariamente al santo sacrificio de Ja misa y. estas dos últimas sema1ias, unos diez a veinte per:;onas han recibido diariamente la Sagrada Comunión. Por las tardes la capillá se ve invadida por unos den niños a quienes enseño el catecismo. Aquí tiene V. el cambio que han operado los vestidos que algunos bienhechores se han dignado enviarme. Fiel a las palabras de Jesucristo a sus apóstoles: "cura te infirmos", visito no solamente a la gente de Bauco sino tambien a los demás pueblos vecinos, siempre con una pequeña provisión de medicinas a la mano, llevada por mi catequista. Llegados al pueblo, nos dirigimos a la capilla si hay una, y si no, tomamos asiento debajo de alguna casa. En un abrir y cerrar de ojos nos vemos rodeados de gente. Y no es de extrañar: ¿no fué el curar a los enfermos lo que atrajo las multitudes a jesús? ¡Ojalá pudiéseis ver a nuestra gente acudir de todas partes para pedirnos cualquier medicina con que curar sus dolencias! Durante tres años, he ob"ervado que la práctica de la medicina ha conseguido atraer más gente que cualquier otra cosa. El Señor, sin duda alguna, bendice mis esfuerzos, pues he conseguido sanar a mucha gente que de no haber sido por mis cuidados y medicinas hubieran muerto irremisiblemente. De esta manera consigo bautizar a muchos niños: sus padres acuden a mi para que vaya a ver a sus pequeñuelos enfermos; yo les encuentro en las puertas de la muerte y con el bautismo les abro las puertas del Cielo. Este es mi consuelo, esta es la satisfacción que experimento despues de todos los esfuerzos qlle tengo que hacer continuamente para obtener algunas medicinas. 205 Le suplico haga una vez mas extensa mi profunda y sincera gratitud a todos los bienhechores que me han enviado ropa para los desnudos y medicinas para los enfermos. Kiangan. P. Desnick nos cuenta lo siguiente: Bunuy es .... o mejor dicho, era un viejo pagano de Buliwung y el más activo venerador de los espíritus en todo el valle. Casi siempre se le encontraba debajo de la casa en donde había un enfermo, ya matando una gallina, ya exorcisando un cerdo u ofrecier.do otros sacrificios que podían, según él, pacificar a los espíritus de la mitología Ifugao que ahora molestaban a la persona indispuesta. Que había una boda, Bunuy era llamado para admonestar y aconsejar a los futuros esposos; para esto, mataba una gallina, examinaba el hígado y pro nunciaba el veredicto sobre la felicidad o desventura de los dos contrayentes, añadiendo si serían o no, padres de una más o menos numerosa posteridad. La gente de Buliwung me gustaba y decidíme a edificar allí una capilla. Para conseguir un pedazo de terreno, tuve una conversación muy larga con Bunuy y el resultado fué que la gente me ofreció una parcela de terreno que convenía a mipl~n. Una vez construida la capiHa, Bunuy fué a vivir cerca de ella y se constituyó en una especie de sacristan, esto es, cuidaba de la capilla. Esto era mucha generosidad de su parte, pero lo que me quitaba de 206 quicio, era ver como Bunuy continuaba Ja práctica ele su devoción favorita a los espíritus, matando gailinas y cerdos y leyendo el porvenir en los hígados de las inocentes víctimas ele sus sacrificios. Le hablé de Dios y de su doctrina, pero Bunuy se quedo sordo a mis palabras y continuaba cuidando de la capilla. ¿Conseguiría yo convertirle algún día? ¿Le concedería Dios la gracia de su conversión como premio de sus servicios? Más tarde fuí a Baguio para hacer mi retiro, y, a mi vuelta a Kianga.n, supe que, durante mi ausencia, Bunuy, ahora incapaz de librarse de las molestias de los espíritus que afligen a la gente con enfermedades, se moría por momentos, víctima de un agudo ataque de disentería. Me encaminé inmedia1amen te a su casa: le encon_tré hecho un esqueleto-el comprendió que se acercaba su fin. -"Padre," dijo al verme, "bautizeme V." La gracia de Dios había hecho su obra. En aquel momento Bunuy me prometió lo que nunca había prometido durante nuestras conversaciones anteriores: me dió palabra de no ofrecer nunca mas ningún sacrificio a los espíritus. Despues de haber escuchado atentamente mis instrucciones, hizo un acto de fe y otro de contrición terminados los cuales, en su misma cabaña yen presencia de multitudes, le regeneré con las aguas del santo bautismo. Desde Buliwung me fuí a otros pueblos, recomendando a mi amigo en manos de la Providencia. La siguiente Eemana, supe que Bunuy había pasado a mejor vida dos días despues de mi salida. Envié recado a sus parientes que vendría a enterrar al muerto. Era el lo. de Noviembre. Con acólitos, crus y candelas, y acompañado ele mucha gente, fuí a casa del difunto. Conforme a las anti~ guas costumbres de los !fugaos, et cadaver había sido expuesto debajo de la casa donde anteriormente había vivido, sentado en una silla, desde que murió y por consiguiente desde hacía algunos días. Pero afortunadamente Je habían puesto en un ataud. En camino para la capilla, que Bunuy había cuidado tan solícitamente, vino a mi mente aquel salmo: "Ad Dominum cum tribularer clamavi et exaudivit me" .... no, la gracia de Dios nunca falta a los de . buena voluntad.... algunas veces una sola obra buena practicada durante esta vida, quizas una única oración ofrecida a Dios,. puede abrir el Cielo .... acordaos del buen ladrón. 207 ,,.~~~~~~~~~~~~~~~ ; Del Pais y Sus Habitantes ; ~~~~~~~í:~~~~~~~N La Psicología del Filipino Por el Hon. Norberto Romualdez Magistrado de la lorfe Suprema de Filipinas (Continuaci6n) 11. Literatura Filipina Ahora os diré algo sobre la litera tura filipina. Claro está que por literatura quiero dar a entender el conjunto de producciones literarias. Un país como Filipinas, con historia y culturas propias, tiene que tener, y de hecho tiene, su propia literatura. Lo dicho en la primera parte de esta conferencia, aunque incompleto, espero, os ha dado a comprender que los Filipinos, en general. poseen cultura, si por cultura se en tiende la ilustración y conocimientos adquiridos mediante la educación del entendimiento. Hay que observar que la presente cultura de los Filipinos es el producto de dos principales elementos: primero, la civilización nativa poseida desde hace tantos siglos, aunque no tan plenamente desarrollada como en la India donde se originó, porqué, como hemos visto, los filipinos estuvieron separados de su país de origen, si bien progresaron con sus propios medios y esfuerzos, bajo las peculiares circunstancias en que la divina Providencia los colocó. El segundo elemento de nuestra cultura, es la influencia occidental traída por la conquista española y que continúa sintiéndo?e hasta ahora bajo la dominación norte america. Parece propio al hablar de la literatura filipina, empezar por pensamiento y estiló filipinos que son el meollo de toda literatura. Empezaré,por tanto,µor hablaros algo de como piensa y expresa sus ideas el filipino, en 10 cual se diferencia mucho del Occidental. 1. Idea y Sentimiento. Cuando el Filipino habla con un Occidental, las más de las veces no es perfectamente comprendido. 208 Ocurre de vez en cuando que el contesta con una sonrisa cualquier observación que se le hace aunque ésta no le sea agradable. Aun sabiendo perfectamente bien que su amigo Occidental está en error y aun teniendo buenas rarnnes en su favor, el Filipino generalmente se calla. Esta manera de ser va modificándose un tan to debido al con tacto con los Americanos. La innata reserva del Filipino va di~minuyen­ do en los de la presente generación y es en algunos casos tan brusco el cambio, que aquella reserva característica truécase en un descaro exagerado que indudablem'mte choca a los mismos Americanos. La transformación sin embargo está aún lejos de generalizarse. La gran mayoría de los Filipinos continúa reservados y pasará todavía un buen período de tiempo antes de que abandonen totalmente tal manera de ser, si es que alguna vez llegan a abandonarla por completo. A esta reserva peculiar se debe que el Filipino con propia familia, esté muy apegado a su hogar por considerar que alli tiene todo cuanto puede desear, y no necesita buscar diversión alguna fuera de su casa. Esta es la razón por que excepto los que están habituados a una vida social mas intensa, los Filipinos son, por lo general poco entusiastos en frecuentar clubs ni en hacer de tales centros parte de las actividades de su vida. En cuanto al oensamiento y estilo literarios, existe diferencia entre el Filipino y el Occidental. Una de las características más peculiares del pensamiento y sentimiento Filipinos es la viveza de la imaginación como lo demuestra el uso frecuente de metafóras y simbofos. El mejor ejemplo de la literatura oriental es, segun entiendo, la Biblia. libro lleno de símbolos y parábolas. Los dialectos filipinos poseen esta característica oriental, debido indudablemente al hecho de que el próximo y el extremo oriente son ramas de la misma cultura oriental primitiva que tuvo su origen en el centro de Asia, de donde se extendió al mismo tiempo que la raza humana al expandir en todas direcciones. Un Occidental que lea por primera vez la Biblia notará tal vez un estilo suelto. Y si es de temperamento religioso, lo atribuirá a que la Biblia es un libro antiguo, inspirado por Di o s. Esto, claro está que cierto, pero creo que ello se debe en parte a que el Occidental no piensa ni expresa sus pensamientos del mism~ modo que el Oriental. Moises y los Profetas, los Evangelistas y los Apostoles eran orientales, y el Hebreo, lengua en que se escribió originalmente 1a Biblia, es tambien oriental. Ejemplo palpable de la diferencia que existe en el pensar y el sen.. tir entre el Europeo y el Filipino, es el siguiente: En castellano dicen: "buenos días" en ingles "g o o d inorning," en francés: "bonjour," en aleman: "guten tag" o "guten morgen ;" pero en Tagalog decimos "magandang araw po" (hermoso dia, señor o señora.) Obsérvese que el castellano, ingles y el frances dicen: "buen dia", esto es, expresan la utilidad y bond:id, mientras que los tagalos prefieran la belleza y dicen "magandang araw" (hermoso dia) y no "mabuting araw." (buen dia.) La Comision de Independencia Filipina acaba de publicar un li - bro titulado" Beautiful Philippines" (Hermosa Filipinas). El titulo me parece otra manifestacion de la psicologia filipina que demuestra una vez mas que el Filipino instintivamente va por la hermosura en vez de ir por la utilidad. De no ser así otro título menos idealísti209 co se hubiera dado al mencionado libro, como "Progressive Philippines" por ejemplo, en vez de "Beautiful Philippines." Como tengo dicho, el carácter del Filipino generalmente no se manifie,,ta enseguida al Occidental, sobre todo c11ando éste no habla el dialecto de aquél. En las lenguas extranjeras no siempre encontramos expresion adecuada para decir lo que pensamos. Cuando hablamos en castellano o en ingles, difícilmente pensamos en estos lenguajes; por esto, la mayor parte de nuestra deficiencia en las lenguas occidentales puede a tribuirse a la manera diferente que tenemos de concebir y expresar nuestras ideas. (Se continuará} ¡Era Taumaturgo! Refiere este milagro prodigioso el protestante Bolzec, en su "Historia de la Vida de Calvino", de quien fué contemporáneo: Un día le vino en talante al heresiarca Juan Calvino el hacer un milagro: eso le iba a dar prestigio estupendo. Se convino con tal Brulé, el cual había de hacerse el muerto. A una hora determinada, Calvino pasaría por su casa; y la mujer de Brulé, que estaba en la comedia, había de gritar y llorar: ¡Mi marido ha muerto!. .. Entonces Cal vino entraría y mandaria al difunto que se levantase de su lecho de muerte: y el milagro se publicaría por doquiera ... Todo a pJinto. Pero cuando el "reformado" tomando la mano de Brulé exclamó teatralmente: "¡Levilntate, Brulé!", se vió qué el falso muerto había muerto de veras ... Y no se levantó: ni quién tal pensare. ... Al momento su desdichada esposa reveló a todos los presentes el secreto; y el "milagro" se escapó más que deprisa. ¡Era Taumaturgo! Decididamente Cal vino era un gran taumaturgo ... 210 Los Negritos del Nordeste de Luzon Por el Rdo. P. Mauricio Vanoverbergh Misionero en la Provincia Montañosa, de las Islas Filipinas (Continuación) Abril 22 (Martes). Tempranito salimos y sin desayunar. Los soldados auimaron la jornada c o n cuentos relacionados con los lugares por donde pasamos. En cierto punto, donde una enorme roca baja perpendicularmente al río, nos contaron que, en tiempos pasados, un caballero. juntamente con su caballo, saltó desde la cima del peñasco hacia la orilla opuesta donde le esperaba su Dulcinea; pero desgraciadamente erró el blanco y caballero y caballo cayeron al agua en donde se ahogaron sin remedio, apesar de los esfuerzos heroicos de la noble dama, quien, en su afan de salvarlos, sufrió la misma suerte, de manera que absolutamente nadie quedó para testificar la veracidad de esta historia. A poca distancia de allí, hay una gran peña partida en dos que se supone ha sido tambien ocasión de otra igualmente interesante aventura. Un matrimonio, que vivía cerca, se pasaba el tiempo disputando desde la mañana hasta la noche .• Al fin, decidieron ambos poner punto final a sus interminables disputas; se separarían, con la condición que la roca, al momento de agarrar cada uno de ellos sus partes opuestas y tirarla hacia si con todas sus fuerzas, se partiría en dos. Como hasta ahora se puede ver, la roca se partió efectivamente en dos y el matrimonio, como habían convenido, se separó. Un poco mas lejos, pasamos junto a una roca elevada, en cuyo lado perpendicular había un enorme agujero. que se supone es la entrada de una cueva, que pasa por varias millas a traves de la montaña hacia la otra parte de la provincia. Desgraciadamente, un cocodrilo reside ahora en la mi'ima y nadie se atreve averiguar la verdad del hecho, aunque parece que hubo mucha gente ~e trató de atravesar el tune! peligroso. En Nagan, donde nos detuvimos un rato, supimos por un comerciante de Cagayan, que algo más abajo de· río, en Sisawan, encontraríamos al presidente de los Negritos. Llevamos, a bordo de nuestra embarcación, al mensajero de tan buena noticia y, al fin, despues de haber navegado por algún tiempo, divisamos el lugar donde por algún tiempo residiremos. Allí nos despedimos de nue~tro Japones; el Sr. Padua ·y los soldados pasaron a pié un pequeño trecho de agua que separaba n u es t r a banca de la orilla; yo fuí mas afortunado, porque crucé este trecho en hombros de Masigun, el presi-. dente Negrito, a quien los soldados habían llamado, y así llegué a ti~rra sin mojarme los pies. No tardamm: en encontrar una casucha abandonada, construida por un Cagayan, donde el propietario había dejado algunos utensilios, que solía usar al venir a este sitio desde Abulug, su residencia permanente. Se quedaba aquí de vez en cuando, por algunos días y hasta semanas, para recoger bejuco de los bosques cercanos. Inmediatamente decidimos usar la casa: no era un palacio, pero el techo estaba en buen estado y así estábamos seguros que la lluvia no nos harííl:n·ngún daño, con tal que el viehto no la forzara a traves de los agujeros que babia en las paredes de nipa; un ventarrón sería en verdad una visita muy desagradable, porque las paredes, partes esenciales de toda casa decente, faltaban en varios sitios. Por donde quiera que dirijíamos los ojos en este momento, no divisábamos mas que dos casas de Isnegs que constituían, con la nuestra, la aldea. de Siwan. Como ya era tiempo de tomar el desayuno, el Sr. Padua y los soldados cocieron una de nuestras gallinas y aquel día disfrutamos de nuestra primera comida a las 10 a.m. No se si hay o ha habido en el mundo carne más dura que la de aquella famosa gallina, pero, suponiendo 211 que hay o haya habido otra, esta id e a a lo menos puede 8ervir de cofüiuelo a nuestra dentadura. En esto, Masigun nos dijo que su hijo estaba enfermo y que tenía que irse a su casa al otro bdo del río, donde vivían ...:ás Negritos; esta era una buena noticia, pues, teniendo Negritos a tan poca distancia, era de esperar que les encon-. traríamos muy pronto. Un poco más tarde, la hija de Masigun y su compañera lavaron nuestra ropa en el río, y, cerca del mediodía, recibimos la visita de tres NEgritos que nos trajeron carne de jabalí, cojido este mismo día, lo que sin duda prometió mucho para el porvenir. En pago, les dimos arroz, aprendimos de ellos algunas particularidades de su idioma o mejor dicho de su dialecto que actualmente usan y les dijimos que viniesen otra vez; y el los lo prometieron. Despues de haber comido (la carne de jabalí era sin duda mucho más blanda que la de la gallina de nuestro desayuno) a las dos y media de la tarde, saludamos al teniente gobernador que 'volvía entonces de Aparri y quien no pu~ do entrevistarse con el gobernador general, porque, antes de su llega· da, este se había embarcado a bordo de un buque de guerra para visitar una estación de radiografía establecida en una isla cercana, donde últimamente se habían visto algunos Japoneses, y c o m o quiera que se hablada mucho de la prohibición reden temen te decretada de inmigración Japonesa en lcrs' 212 Estados Unidos, temía por alguna complicación internacional; esta a lo menos fué la explicación que nos dió despues; que si era verdad o no, yo no lo se. Nos despedimos de los soldados que se marcharon juntamente con el capitán. Esto fué un gran alivio para mí aunque mi compañero hubiera . preferido guardarles con nosotros todo el tiempo. No tardaron en visitarnos algunos Isnegs. Conversamos algún rato con ellos y otro rato con el comerciante de Cagayan que había venido en busca de .bejuco y vivía en una casucha temporaria situada en la orilla del río, a unas cincuenta yardas de nuestro palacio. Ya era muy tarde cuando nos acostamos, pues, no teniendo ni al mohada ni sábana, y estando el suelo siempre preparado, era una cosa muy facil acostarse a cualquier hora. Nuestras.comidas eran tambien un problema no sin dificultades durante toda nuestra estancia aquí: a la mano no teníamos más que algunos utensilios ~viejos y prestados, una taza c o n un agujero en el fondo, nada de cucharas, y viandas muy pobres: pimienta, tomates silvestres, setas de la marca cuero o "rompe dientes,'' algunas veces berenjena, un poco de maiz, algunos plátanos, una calabaza medio podrida y de vez en cuando un huevo de "okong," un ave aquática bastante grande, o un pedazo de carne (esto hemos tenido dos veces) cuando a los Negritos les daba la real gana de ir a cazar. Sin embargo, no nos morimos de hambre, porque teníamos arroz en abundancia, aunque -nuestro menú estaba muy lejos de ser suculento y variado, y, comer con los dedos nunca ha sido "mon fort." (Se continuará) ACERTIJOS 1 Soy blanco, pero manchado por todas partes de negro; me esperan con impaciencia y todos los días llego; me ven, y al día siguiente me desprecian ya por viejo; pero cuando vuelvo, todos me buscan porque soy nuevo. 11 Alas tengo y no soy ave, y a veces llego a volar, pies no tengo, y corro y ando _ y voy de acá para allá_ 111 ¿Cuando pesa más una persona? (Veánse las soluciones de estos acertijos en la página 222) Alemania. El Septiembre pasado, Monseñor Pacelli, Nuncio de Su Santidad y decano del cuerpo diplomático en Berlin, fué a Colonia en aeoroplano para asistir al congreso católico. Más de 80,000 personas, bajo 500 banderas flamantes, asistieron a la misa pontifical. "Cristo el Rey" era el lema de la asamblea. Los temas que se trataron en el congreso fuerc;m: la condición y el deber del tr,ibajo católico; escuelas cató1fcas':" los problemas de la juventud y las posibilidades del apostolado seglar. Belgica. El Rdo. P. Lama!, que celebró el año pasado el septuagésimo quinto aniversario de su ordenación, cumplió, hace dos meses, en Malinas, ep medio de grandes festividades, sus cien años. En presencia de Monseñor Rutten, Obispo de 'Lieja, y de una comisión compuesta de sacerdotes y médicos, fueron exhumados en el cementerio de Hasselt, los restos del Rdo. P. Valentin Paquay que murió en olor de santidad el 10. de Enero de 1905. La causa de su beatificación ha sido ya introducida en Roma. Czecho-Slovakia. - Praga. Unos 4,000 católicos asisti~ron a un meeting público de protesta contra la persecución de los católicos en Mejico, cuando el ministro Mejicano en Praga escribió un artículo en un periódico local, defendiei:do la política de su gobierno e insultando al mismo tiempo gravemente a los católicos de Czecho-Slovakia. El rueeting, presidido por el diputado Myslivec, proclamó su desprecio por el gobierno Bolshevikista de Méjico y por los esfuerzos de este en tratar de ahogar la libertad de sus ciudadanos, declarando al mismo tiempo que una organizada y con_scienzuda acción católica es el mejor remedio contra tales ateutados. Reuniones de igual índole se celebraron lambien en Irlanda, Francia, Estados Unidos, Chile, Brazil. España y en otras naciones. ¡Si solamente se uniesen los 300,000, ooo de católicos que hay en el mundo entero para protestar con palabras y obras contra cualquier atentado 214 que ponga en peligro el reinado de Jesucristo sobre la tierra! Estados Unidos. Entre 250,000 y 300,000 personas asistieron a la Misa Pontifical que celebró su Ema. el Cardenal Dougherty en el '' Sesquicentennial Stadium'' de Filadelfia, en acción de gi:acias por los beneficios recibidos durante los ciento cincuenta ai'ios de independencia Americana. Antes de la misa, hubo una procesión de unos 85,000 católicos, todos HOMBRES. Francia. Hace 400 años, el Rey Carlos VI prometió edificar una iglesia en Domremy si Juana de Arco conseguía expulsar a los ingleses de Francia, promesa que nunca cumplió. Ahora las habitantes de esta aldea de Lorraine, despues de haber trabajado durante 33 años, acaban de inaugurar la iglesia que está situada· en una colina frente a la casita donde nació la Santa. Filipinas; Ta~bien Filipinas tuvo su gigantesca manifest°acién católica con motivo de la fiesta de Cristo Rey. Unos 20,000 hombres asistieron a la procesión del Santísimo que salió de la Iglesia de la Ermita en dirección a la Catedral. El Santo Padre, en su celo y carillo para el pueblo Filipino, ha enviado 20,000 pesos al Ilustre Señor Obispo de Lipa para ser distribuidos entre los damnificados por el último baguio ocurrido en la provincia de Batan gas. Nunca se ha visto congregada una muchedumbre tan numerosa en la Luneta como en la tarde del día 28 de Noviembre con motivo de la coronación de la Virgen de Antipolo. Según unos cerca de 80,ooopresenciaron el acto y según otros hubo más de 100,000. Durante los nueve días siguientes, la catedral de Manila se ·vió invadida por inmensas muchedumbres cada mañana y tarde y algunas veces durante casí todo el día: ¡tanta es la fe de los Filipinos en su Madre, la Madre de Jesucristo! Un papelucho protestante, escrito por un cobarde que no reveló su nombre ni el de la imprenta en donde se imprimió la hoja de blasfemias en contra de la Coronación, no hizo mas que llamar la atención y activar el fervor del pueblo Filipino hacia la Santísima Virgen, tan cobardemente insultada: el demonio fué cogido en sus propias redes. Pero cuidado cobarde escritor: Nuestro Señor es mny manso cuando se le insulta a El, pero cuando se insulta a su Madre, se hau visto ejemplos de manifiesta y terrible vengauza del Cielo. Durante el Congreso Mariano que precedió la fiesta de la Coronación, las juntas de sacerdotes, a proposición del Rdo. P. Dr. Lopez, de las damas católicas, y de los estudiantes, aprobaron la resolución de ayudar a las misiones, y, poniendo manos a la obra, los estudiantes de la Universidad de Sto. Tomás, llevaron a cabo un "drive" para recoger más suscripciones al ''LITTLE APOSTLE" y "ELMISrüNERO:" es que los estudiantes comprertaieron, que es inutil y en vano que se decida a ayudar a las misiones si la gente no las conoce por medio de la lectura. Guatemala. El presidente Orellana, que en estos últimos meses había imitado a Calles persiguiendo a la Iglesia, murió a fines de Septiembre, víctima de un ataque de corazón. Se dice tambien que Plr1tarco Calles padece de un cancer, de cuya enfermedad murió IJerodes despues de haber dec~etado la muerte de los niños / in()s.-entes. Informes de la Santa Infancia. La sociedad internacional de la Santa Infancia acaba de publicar sus informaciones del año 1925. Las limosnas recibidas por la sociedad llegan a 20,000,000 de francos, un aumento de 6,000,000 sobre el año 1924. Como el aumento de los gastos no ha sido más que de 800, ooo francos, ha sido posible con(.eder subsidios más amplios a las misiones. Del nuevo aumento de ingresos, 4,000,000 fueron recauda. dos en Europa; i,600,000 en ambas Américas, 40,000 en Africa y 120, óOO en la o~eanía. . ' 2i5 Italia. Toda la prensa Italia, con el Popolo di Roma que es del gobien:o y el Ossen·atore Roma1:0 del Vaticano a la cabeza, están c~iscutie1;C:o la posibilidad de un arreglo c~e las relaciones entre el Vaticano y el Es· tado. No se ha publicado aun ningún anuncio oficial. Se dice que el gobierno esta dispuesto a reconocer al Santo Papa como jefe espiritual de Italia y aproveer las propiedades pontificales con un acceso al mar y a las montañas, construyendo una estación de ferrocarril a las puertas del Vaticano. Cien mil personas han concurrido a la celebración del séptimo. Se celebraron tambien fiestas en Roma, Milan, Italia, Inglaterra, Bélgica y Latvia con motivo de este cei.tenario. El Santo Padre fué suplicado que nombrase al Santo como patrón de la juventud católica. Polonia. · Polonia entera, que durante un siglo de esclavitud fué siempre fiel a la fe católica, y en años recientes ha resistido heroicamente la influencia corruptora ce su vecino, Soviet Rusia, acaba 9e ·celebrar en Agosto el segundo centenario de la canoni· zación de San Estaí1islao Kostka con un magno congreso católico que trató de la regeneración de la familia católica. Durante el congreso, las reliquias de San Estanislao, traídas de Roma, fueron llevadas solemnemente a la ciudad de Rostow donde nació el Santo. 216 ~~~~~~~~~~~~~~Wit~ ! -~ Buzón ~ J )l~~~~~~~~~~w;q,~w;q,8)( Pl'ey1mta: - iii es rerdad que la Iglesia Cu.tólica es i1q'aliúle, entonces nosotros los católicos poseemos la rerdadera doctrina, tr.i l cor110 la enseñó Jesucristo. Yo creo, conw se ha explicado, que la J.qlesia de J~sw:rist" deúíá sel' instituída infali11/e ¿pero. comn se ptiede probar por la Ril1lia que la lylesia es i1~falibld Respuesta: - Antes de contestar esta pregunta, es necesario determinar lo que se entiende por la Iglesia que se dice ser infalible. La Iglesia es: el Rumo Pontífice, o, son los Obispos del mundo juntamente con el Santo Padre, cuando él o ellos enseñan la doctrina o 1 a moral cristiana a todos los fieles. Estando Jesucristo en este mundo, escogió a doce apóstoles cuyos sucesores son los Obispos. Entre estos doce señaló un jefe, San Pedro, cuyos sucesores son los Sumos Pontífices. Es evidente que las prerrogativas que Jesucristo dió a sus apóstoles para Ja salvaCión de los hombres, fueron concedidas, no solamente a ellos, sino tambien a sus sucesores, porque Jesucristo vino al mundo para salvar no únicamente a los que vivían en tiempo de los apóstoles sino a todo el linaje humano hasta el fin del mundo; y asi como los medios de salvación conferidos a los apóstoles eran necesarios en su tiempo, así tambien estos medios son igualmente necesarios ahora y lo serán hasta el fin el mundo. ¿C,mfirió Jesucristo la infalibilidad a los apóstoles? En San Mateo, XXVIII, 18-20 se encuentran las siguientes palabras de Jesucristo a sus apóstoles: "Todo poder se me ha dado en el Cielo y en la tierra. Id por conf:iguiente, enseñad a todas las naciones ...... enseñadlas a observar todo cuanto os he mandado; con vosotro" estaré siempre hasta la consumación de los siglos." Estas palabras significan que los apóÚoies ~· s1~s sucesores tienen que enseñar todo lo que Jesucristo ha enseñado, tarea que no pueden llevar a cabo sin saber lo que Jesucristo ha enseñado, por cual motivo Jesucristo añade, que estará siempre con ellos (los apóstoles y sus sucesores) hasta el tin de] mundo, _esto es, que Él les asistira eficazmente a enseñar todo lo que Él ha enseñado y quiere que sepan todos los miembro~ de su I¡!lesia, para la salvación de suri almas. Supongamos por un momento q~ los apóstoles o sus sucesores, esto es, la Iglesia de Jesus enseñe errores que tenernos que creer para salvarnos. ¿Que· sucedería entonces? Sucedería, que en aquel momento, Jt>sucrii::to sería infiel a su palabra ·dada a los apóstoles, de ayudarles constantemente hasta la consumación de los siglos. Bien sabem<•s que esto no puede ser: Él es Dios. ir finitamente sabio, poderoso y santo, y por consiguiente, nQ seria Dios si faltase a rn rnlemne promesa empeñada a sus aróstoles o sea a su Iglesia. ¿Que es pues lo que de esto debemos deducir? Que la Iglesia no puede nunca equivocarse en cuestion de fe o moral cristiana. Las palabras de San Mateo que acabamos de citar son una de las muchas por las cualesJei;:ucristo predica la infalibilidad de su Iglesia. En la respuesta anterior, hemos visto que Jes;rcristo, siendo infinitamente 217 sabio, tenia que conferir la infalibili· dad ~ su Iglesia. En la presenta respuesta vemos el hecho de conferir dicha prerrogativa. Por consiguiente: los católicosobran discretamente al recibir de los intér· pretes infalibles de la Biblia, la doctrina qüe esta contiene. Aquellos por otra parte que la reciben de predicadores falibles, que exponen las miras de los mismos, son muy imprudentes; si estos rechazan la infalibilidad de la Iglesia de Jesucristo, son simplemente unos herejes, porque rechazan un punto de doctrina evidentemente cop· tenida en la misma Biblia, la palabra de Dios •. En Boca de Una Ciega ¡Madre, madre del alma! Quién pudiera Contemplar de tu rostro la sonrisa; Y quién tus canas venerandas viera. Acarieiadas por la mansa brisa.! Y gozar del fulgor de esa mirada Reveladora de tu ardiente celo; Ver de tus labios la oración sagrada Con alas de ángel remontarse al Cielo ..... ..... No lo quiso el Señor. Mi fantasia Sólo de sombra y de negror se puebla; Y cuando brilla en su esplendor el día, Se ·aumentan mis ojos de tiniebla. Me privaste de luz: ¡gracias, Dios míol Quizás de ella gozando te ofendiera ..... La luz eterna contemplar ansio, Y la faz de la Virgen hechicera. No retratan mis ojos los colores, Mas son heraldos de dolor profundo: Y si ne:> ven del mundo los primores, Pueden llorar los crimenes del mundo; Y brota de mi,s ojos otro llanto; De gratitud, de.amor y de ternura: Sabroso fruto del afectó santo Que es único solaz de mi' amargura; Y al bendecir al Padre Soberano Que me libró del mundo y su falsfa, Siento el apoyo de tu tierna mano, ¡Oh Madre de mi amor, Virgen María! ..... X., S. J. 218 Manila, 15 de Diciembre de 1926. Queridísimos lectores: - Hace unas tres semanas la oficina de "EL MISIONERO" tuvo el honor de recibir la visita del Ilustre Prelado Monsefior Sancho, Obispo de Tuguegarao, Cagayan. Acababa de llegar a Manila aquella misma maí'iana y nos sorprendió con su agradable visita un par de horas despues de haber desembarcado: lo que evidentemente demuestra el carifio del Obispo en cuya diócesis están trabajando algunos de nuestros Misioneros. Pero lo que aun prueba el zelo de Monseñor Sancho para las misiones, es el hecho de habernos remitido una lista de setenta y siete nuevos cruzados juntamente con siete nuevas suscripciones al "MISIONERO, "indicándonos a su vez los nombres de algunos de sus más activos sacerdotes que, como él, tienen a corazón el ayudar a las misiones y que sin duda al¡runa nos procurarán nuevos suscritores y cruzados. A tan celoso pastor de almas que de cada uno de sus sacerdotes y feligreses quiere hacer un apóstol para la conversión de los infieles que viven al lado y en parte de su diócesis, vaya nuestro voto de gracias. Una carta de L. C.:_ Habiendo tenido noticia de que un pariente a quien estimamos, se babia puesto muy grave, acudí a Sta. Teresita, prometiéndola que si el enfermo se curaba por su mediación, enviaría una limosna, juntamente con otra de la esposa del enfermo, para sus misiones y lo publicaría al mismo tiempo en la revista. "EL MISIONERO." Concedida la gracia, gustosa envío lo prometido, dando al mismo tiempo mis más expresivas gracias a la Santa por este favor concedido. ¡Lástima que no nos sea permitido publicar el nombre del autor de esta carta! pues siempre se puede dudar de la veracidad de una carta anónima o !lOSpechar del hecho que relata. Hay personas que tanto temen la publicidad que aun cuando mandan alguna ayuda para las misiones, callan sus nombres. Asi recibimos una carta con una limosna adjunta, de un "buen Cebuano " . ' a qmen enviamos gustosos nuestras más sinceras gracias. Comprendemos que no se busca la publicidad al, hacer una obra cristiana y por esto cuando se nos manda que publiquemos un favor concedido pero que callemos el nombre, lo hacemos siempre. Todavía no sabemos nada si la "SEMANA DE ABNEGACION" ha sido un éxito. Sin embargo, a juzgar por las primeras limosnas recibidas y por las promesas de algunos de los más activos promotores y promotoras, parece ser que, este afio, la semana de abnegación producirá más per capita que el afio pasado. ¡Cuantas mortificaciones habrán subido al Cielo en imitación de la gran mortificación del Salvador al hacerse hombre! ¡Cuantos méritos! Y todo esto redundará en bien de las misiones, en la oonversión de los infieles, que servirán al Sefior y harán redundar en favor de sus bienhechores los méritos que ellos ganarán a su vez. "EL MISIONERO." 219 Retrato Físico de Jesucristo Publius Lentulus, el Procónsul de Judea, en la carta que escribió al Senado dándole cuenta de la existencia y hechos de Nuestro Señor Jesucristo, hace su retrato en los siguientes términos: ''En estos tiempos ha aparecido y en estos días vive en medio de nosotros, un hombre de singular virtud a quien sus discípulos lla· man 'Hijo de Dios.' Sana a los enfermos y resucita a los muertos. Posee una hermosa figura y es digno de atención. Su fisonomía es de tal naturaleza, que los que le miran pueden amarle y temerle a la vez. Sus cabellos son de un color rubio, puro y franco, lisos ]tast"a las orejas, y desde éstas hasta sus hombros, descie11den u11 po· co rizados en bucles separados ; una raya divide el pelo en el centro de la cabeza, y cada mitad va echada hacia u11 lado, según es la moda de Naza::-eth. Su frente es tersa y serena, sin arrugas ni manchas; su rostro está embellecido por un ligero carmin; la nariz está bien configurada; la poblada barba es del mismo color que los cabellos, rubio claro, y va separada por el medio. En su mirada se pinta la sabidu· ría y el candor; sus ojos son azules como luces y reflejos de colores di· ferentes. Muéstrase terrible cuando reprende: en su conversación es muy afable y sus observaciones es· tán siempre hechas con vive1a a pesar de permanecer siempre tranquilo. Nadie le ha visto reir, pero a menudo se le ha visto llorar. "Su talle está bien configurado; su cuerpo derecho y esbelto y sus brazos y manos son tan hermosos, que causa placer mirarlos. Su manera de hablar es grave. Habla poco. Es modesto. En fin, es todo lo hermoso que puede ser un hombre. Le llaman Jesús, hijo de María." Tal para Cual - -La vida es un viaje hacia la eternidad. -En la lucha conocerás quien eres. -El más glorioso heroismo Es el vencerse a si mismo . .-No es más sabio quien mas habla ni mas discreto quien mas calla, ~ino quien habla mejor y calla cuando conviene. -Aquel sabe vivir bien, quien sabe orar bien. -El carácter si no es esclavo, esclaviza. 220 Pagina Teresiana Tomado de una carta escrita por la Rda. Madre Priora del C irmelo en Polonia. L. Polonia, I 2 de Julio de 1926. EBIDO A LA POBREZA de nuestro ('Onvento y de nuestro país, nos convencimos que era realmente imposible reparar por ahora 1iuestro deteriorado convento. Figuraos: las reparacioues costarían 50,000 francos. El año pasado nuestra situación se hizo insoportable: la lluvia y la nieve entraban en r.uestra capilla por todas partes: en una palabra, no había otro remedio mas que repararla, pero ...... no teníamos absolutamente nada con el cual poder empezar las obras. Con ilimitada confianza, decidimos dejarlo todo en manos de nuestra ''pequeña gran Santa. '' Despues de pocos meses, se habían hecho y pagado las reparaciones ..... como fué posible? nosotros mismas nos preguntamos ..... . Dios, para convencernos que realmente era nuestra Santita la que nos había hecho este favor, había 0 permitido que todos nuestros bienhechores que solían ayudarnos siempre, no pudiesen !?OCorrernos, no obstante sus grandes deseos, pues la guerra les había dejado sin dinero. Otro favor que debemos a Santa Teresita es el siguiente: Algún tiempo antes de las Pascuas, ya no quedaba nada de nuestra pequeña provisión de azúcar. Para las hermanas que gozan de buena salud esto no significa nada, pero para las enfermas ....... podían estas pasar sin azúcar? Mi corazón de madre estaba realmente ansioso. Las enfermas necesitaban azúcar, pero ¿como y donde conseguirlo? Despues de vacilar a~gun tanto, me decidí enviar a una Hermana a casa de una de nuestras vecinas, una amiga del Carmelo, quizás ella podría darnos un poco de azúcar para nuestras hermanas enfermas .... más tarde devolveríamos la cantidad de azúcar prestada. Pero .... "escribamos antes una carta,'' dije. Tomé la pluma y puse la siguiente carta, "Santa Teresita, no tenemos mas azúcar.'' Lo entregué a la Hermana y le dí instrncciones para que lo colocara en la capilla a los pies de la imagen de Sta. Teresita. La Hermana para impedir qt.le otras personas vieran la carta para que esta no fuesa sacada de an;, en vez de colocarla a los pies, la puso en las manos de nuestra dulce protectora. Ved aquí como la carta fué contestada y nuestra confianza premiada. Era entre 10 y 1 I de la mañana. A nuestro recibidor llegó una monja para pedir oraciones del Carmelo, ·"y ved aquí un pequeño presente en honor de Santa Teresita, '' añadió ella, depositando s kilos de azúcar sobre la mesa. ''Me pregunté a mi misma lo que podría seros útil y vino a mi mente ofreceros este pequeño regalo de azúcar. , , y terminó eón una sonrisa. . Ittiaginaos nuestra emoción ..... y 1'lí"'áe esta monja despues que le contamos nuestra estratagema. . La buena monja estaba ·ªun en el reci9idor, cuando llegó una"señora pidiendo enviase a una de las hermanas a su casa para recoger unos cuantos kilos de azúcar que pesaban demasiado para llevarlos ella sola. Por la tarde de aquel mismo ·día recibimos aun más azúcar y desde entonces podemos decir que empe.M>. una verdadera • 'procesión de azúcar ..... " tanto, que para Navidad, esto es, una i.emana despues de haber nosotras colocarlo la carta en las manos de Santa Teresita, teníamos 50 kilos de azúcar ..... todo regalado. Esta vez gracias a nuestra Santita, pudimos- dar azúcar a nuestras queridas hermanas en.fermas . y a algunos enfermos pobres, vecinos nuestros. Asi es que estas Navida221 des de Sta. Teresita se puede decir fueron ''azucaradas'' para muchos. Y ahora otra providencial delicadeza. Hace algún tiempo, el doctor mandó a una de nuestras hermanas enfermas, Sor T ..... que tomase de vez en cuando un poco de cognac. Además tenía que usar un corsé de hiecro, pero como los vestido!' de lana impedian en gran manera el uso de este corsé era necesario proveer a la Hermana con otra clase de ropa interior. ''Santa Teresita ayúdanos,'' dije. Aquel mismo día vino una señora trayéndonos algunas botellas de cognac. "Esto quizás sirva para vuestras Hermanas enfermas'' dijo ella. Al siguiente día cierta persona vino a dar gracias a ''Tereuia'' como llaman aqní a nuestra Santa. Entró en el recibidor y dijo: ''No quil'e venir con las manos vacías, y no tepiendo otra cosa que daros por ahora, he traído conmigo unos quince metros de percal. Aceptadlo, espero que os servira de algo. " Imposible sería relatar todos los favores que hemos ~ecibido de Sta. Teresita y los milagros obrados por nuestra gran Protectora. NOTA: Queridos lectores, ya \·eis como Santa Teresita no es invocada en vano y como está siempre dispuesta a satisfacer aun las más pequeñas necesidades de los que la invocan con entera confianza. ¿Cuanta es vuestra confianza en ella? ¿Cuantas veces al día la invocais? ¿Que es lo que haceis para honrarla? 222 El Gran Legado Por Santa Teresita la gloriosa, la del Niño Jesús y del Carmelo, que envía inspiraciones desde el Cielo, progresa la cruzada religiosa. Su reliquia que es prenda milagrosa, para el cuitado es bálsamo y consuelo, remedio poderoso para el duelo y para el alma oscura es luz radiosa. Es sacro talisman, todo eficacia, que avasalla al escéptico al instante y deja al pensador paralizado. Y tan preciado objeto que, por gracia, prodiga su virtud siempre arrollante, es de la excelsa Santa el gran legado. J. F. A. Iloílo, Nov. 1926. NECROLOGIA Cruzados Difuntos Felici1tad Velasco, Aparrl, Cagayan; Paz Ponré, Ilog, Neg. Occidental; Ped1·0 Pañyan, J.,ubao, Pampanga; Sabina Faelnar, San Nicolas, Cebu; Ru.fina Pavon rle la Portiila, Daet, Camarines Nol'.te. · · Rd-0. Padre Fm·nando P1·insen, murlo en China; S1·a. De Pauw, madrn del Pa· dre Rdo. De Pauw, murio en Belgica. R. l. P . ...... ... .... Solución de los acertijos en la página 212: l. EL PERIÓDICO. U. LA NAVE. III. CUANDO PISA EL CALLO A OTRA. 223 Pequeia Historia de la Vida de Sta. T eresita del Niño Jesus por el R. P. /. Carbone!, S. J. (Continuación) CAPITULO SEPTI.MO El q ne Siembra~ U., e coge IOS RECOMPENSÓ los sacrificios de nuestra pequeña heroína dándole un gran dominio de sí misma. Un domingo que había estado de paseo en el campo recogiendo amapolas, espigas de oro y margaritas, llena de gozo volvío a casa pensando pon-::r sus flores en agua, cuando su ahue.1~·:1ás reclamó para su altar. La pequeña Teresa fué dando de una en una hasta la última flor. Su corazón lo sentía, pero nada dejó traslucir; no obsllante, al ser interrogada por su hermana Celina, que la cono~ía muy bien, le confesó que, efectivamente, había hecho una "gran práctica" al dar todas sus flores. . Esta .costumbre de cedar sin replicar, la venía ejercitando desde que tenía uso de razón, y, no obs!.ªnje, hubiera sido de una naturaleza rebelde si no se hubiera dominado. Fué precisa toda la energía <le st1 madre para hacerle aprender las letras del alfabeto: era tan viva que no podía estar ni cinco minutos en su sitio. Cuando veía acercarse la b o r a de la 1 e c c i ó n, se escondía; mas luego, arrepentida, salía, dejándose aprisionar sobre las rodillas maternales, tratando de.en· tender y retener el nombre de la letra que su mamá indicaba con el dedo. Sus hermanas sentían gran placer al escuchar la; su padre, más lejos, leía el. periodico, pero la sonrisa de sus labios dejaba f adivinar. que se interesaba al mismo tiempo en el trabajo de la reine~ita cuyos progresos le regocijaban. De natural muy ardiente, Teresa hubiera podido correr, como ella decía, a "su perdición eterna". Os contaré, mis lectores, un rasgo que tuvo a esta edad y que 224 muestra a las claras su fuerza de voluntad y su orgullo nativo. Su madre le dijo una día: -Teresita, si besas el suelo te daré una ''perra chica.'' Una ''perra chica" era para ella toda tmafortuna, y, sin embargo, replicó: -No mamá; prefiero no tener la moneda. Y antes de llevar a cabo tal acto de humillación, prefería perder la recompensa. Tal naturaleza, de no haberse reprimido. hubiera sido necesariamente org.ullosa y egoísta. Pero ;;ada de esto ocurrió. Tenía un espíritu tan recto, que bastaba eón decirle una sola ,·ez ''esta cosa no está bien," "esto ofende a Dio!," para que ella jamás volviera a intentar hacerla. Así que los demonios huían de ella con horror, humillados de ser vencidos por un ser tan débil. Tuvo Teresita una viva imagen de esta verdad en el sueño siguiente: Una noche se paseaba sola en el jardín, cuando <le pronto vió d~ horribles diablillos que bailaban sobre un barril con una agilidad sorprendente. a pesar de los pesados hierros que llevaban en los pies. Le dirigieron, primero, miradasardientes; despues los vió como, sobrecogidos de espanto, precipitabanse dentro del barril para salir enseguida sin saber por donde, echar a correr, y ocultarse finalmente en el ropero que estaba a piso bajo al lado deljardin. Hallándolos tan poco valientes, quiso saber lo que iban a hacer, y, dominando su primer espanto, se asomó a la ventana .... Los pobres diablillos corrían sobre las mesas sin saber como huir de su mirada. De cuando en cuando se asomaban, y, viéndola siempre allí, echaban a correr como desesperados. Este sueño, niños míos, es imagen de una realidad¡ los demonios son cobardes y nada pueden ante un alma en estado de gracia, puesto que ni siquiera tienen un valor de sostener la mirada de una niña de cuatro años. Mas para hacerlos inofensivos hasta este extremo, es preciso guardar el alma tan pura como Teresita. ¿Creeréis, quizá, que la piedad de Teresa le impedía ser alegre? Pues no; todo lo contrario: todo cantaba en su alma; todo en ella era florido y soleado. Amaba los árboles, el campo, los pájaros y los nidos; le gustaba correr y balancearse lo más alto posible. Ante esto, su madre temblaba mientras que Teresita gritaba de gozo. Cuando su padre venía a casa, ella salía a su encuentro y sesentaba en una de sus botas, y así partía de amazona ba~ta el jardín a donde su padre la llevaba para aumentar su dicha. Despues la cogía, la sentaba en su hombro, la levantaba en alto y la acariciaba tiernamente. Cum licentia ecclesiastica Don 't forget to buy "The Psvchology of the filipino" by Hon. Norberto Romualdez of tite Supreme Court ··~~·· It is the best book in the world writtt~ll on this subject. It shows what the Filipino is This book spread in the Ijhilippines and tlie 1J nited States would do mnch for Independence Richly Illustrafed Send One Peso to "THE LITTLE APOSTLE" P. O. BOX 1393, MANILA s --------- - - - - - - - - - - ll Jrlirrs lSasruas 1926 -1927