Mensaje que dirige a las cortes SE el Jefe del Estado al remitir el texto...

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Part of Espana Boletin Informativo

Title
Mensaje que dirige a las cortes SE el Jefe del Estado al remitir el texto...
Language
Spanish
Year
1953
Subject
Spain-United States--Foreign relation
Rights
In Copyright - Educational Use Permitted
Fulltext
~ENSAJE _Q!::fF¿ Dl!_tlGE_ A_L~?- CORTES S. E. EL JEFE DEL ESTADO AL REMITIR EL TEXTO DE LOS CONVENIOS CONCERTADOS ENTRE-ESPAÑA·Y-LÓS ESTADOS UNIDOS DE AMERICÁ-. -FRANCO EXPLICA-ALOS ESPAÑOLES LA TRASCENDENCIA DE ESTOS ACUERDOS. A las Corles de: la Nación: AJ remitir a las Cortes de la Nación el texto de ]os Convenios concertados por mi Gobierno ('.On los Estados Unidos de América, que marca, d jalón más ímpo(· tante de nuutra po!itlca exterior c.onrempodne:a. es mi propósito el señalar las razones y fundamentos más destacados que moti\•aron estos Convenios. que. sin duda, han de tener honda trascendencia para el futuro de nuestra Patria. La poliCic<i exterior del Movimiento Nacional en la Cruzada. durante la gut rra urtivers,"1.1 y en la postguerra Págln.-. 30 que padecimos. ha sido recta y clara: !letvir a la dignidad, a la grandt::z:a y al progrtso de nur::stra Nadón, interpretando lealmente Ja voluntad y los anhelos de re .. nacimiento de nuestro pueblo. La serenídad y firmeza con que cuidamo.s durante nuestra Cruzada de evitar situaciones de. mayor violencia que pudjeian alterar. llega .. da la paz, nuestra huena relacíón con los otros pueblos. permitió qut terminásemos nuestra iucha lnterjoc sín que se hubieran alterado las relacíone:s que: tradicionalmente mant~niamos con las distintas naciones. Surgida. pocos meses después. la conflagración uníESPAfM vers.1 contra nuestro interis y en nuesrro _perjuicio. pese a las alternativas que Ja guerra ofreció. &spitña man.tu ... vo durante este- parént~i.5 btUco rclaci6n amis.tosa con. codas las nadones. Fué du.rantt estos htrnpos en que b guerra ¡.e acercó a nuc.str3J frontcr.u y a nuestros maro cuando. en ddensa de la pai y de la 'ntt-gcidad. de nuestra Península. suscribimos los Acuecdos con la nactón portugutsi\, que tantos btnd1 ct0.s habrlon dt: tt:portar a la pat y a la compencuadón entre nuestros dos pu•blos. No se ocultaba a nuestra pcrsplcacla la clara 'lfjsión dt las ot11cutmdes de la postguerra, m las amcna%as que .sobre ti ücc1dtnte se ac.umu1aban, y ante la grave ncce~tdad oe tas horas que: hablan de avecinarse. mtentamos roac1ht~r t i necesa.o o entendimiento occ1 dtntal acliuanao nuts1ra1 rclaaonu con sa Vr<in br«tana, qut por ~1 1UJ1smo ~u.e traa1tiona1mc:ntt c..racter110 su pouuca y t i ... precio qut baclamo.s dd va.loe duarrolbdo por sus JU\'<Dtudu upccia1mc.ntt en .a mar y tn ti a1rt, nos hacia conu.b1r la e.spuanza dt qut, hegada la pu . • pu<ht'ª Kr un Jactor conStcuct1 vo para la umón dt Uecadenle-. Cre:1 an1os que las: lrctiones d e la guerra habrlan de su aprovtcbadas. y que los impt11ar1all~mos dt ayu habrlan dt trocarse e-n medidas pri.clica.s dt justic.ia, con· 11an:z.t y colaboración ~ntrt 1.u na:c1 onu ubicadas tn una misma A rea geog ráfka, y quisimos. antes del final dt la gran contienda. dar a conocer a h1 mis importante de lns nadones del Occkicntc europeo nues<cos propósitos lrtntt a Jos aconttdmitntos que 3 pluo hJO h'a!>ian de surgir. 01!icilmtntt se ~signan lu n.ac. 1onu <lytr hnpcrial1.:1t a tnoegar ti cetro de sus privilcg.os, )O que v1ent toda,·ia uracttrizando d torcejeo y rutn•u que se acu.S.'ln en el sen·1cio al inreré.'i general dt 11 hor.;l pre<:oen<e. En tslt cuadro genera) babia de def1mrx la política t:xterlor cspaAola.. - ¡Paru qu~ rrcordar, si tn t i ánimo d t todos Jos espa.~oJes tst.11 la ceguera con que se acogió nuestro ·prop6.sí10! No tardaron muchos muu para pode.e comprooar que náda había cambiado t n la vicia mental!dad del Vcddente y que España necesitaba cruz.ar sola lo.s m.lr~s rcvuf!!tos ae la po:i:<9uerra. t'ueron tantos los errores cometidos en tstos anos con su secuela de pueblos vendidos y entregados, que hemos de conslduamos felices de no tcntt la menor responsabilidad en la tribulación en qut tantas naciones dt Europa se ven sumidas. Dtvfdklo Europa en venctdorts y vencidos. deseqWlibrada por ti creciente poder t 11'1.\.ac1 able ambición so\•1tt1ca. se imponia un forudo com~s de cspua en nuutrH relaciones por cuanto a Europa se refiriese. El Movimiento Nacional upt~ol. pleno de vigor y de ,u .. ·entud, for:z:osam~ntt tenia que chocar con el egoismo t incompren.sión de tantoJ pueblos de nutstro Contintnlt. Esto e.xplica. la atracc-i6n que unpu)i" 'l nuestro putblo hMia li\s nac:icnes j6venu, ligadas a é:l pot tantos vlnculos histórkos. y que en en necesidad de asodscl6n que caracttrita la era tn qut. vi\límos, por encíma de su poder material. supiese apreciar el idealismo y la 1uventud del pueblo de ~ Estados Un!dos, tan desfigurado por las malictosas propagandas. ptro que la hora de la verdad sabe morir en Europa o m Asia, a varios: m1Uart:s de millas d~ su paula, haciendo honor a sus compromisos e ideales. Que los pueblos no pueden vivir sin una política tx· 1trior, tJ cosa evidente. U falta de una polltica in tu.nacional en la vida dt nuestra pil"tria y ti abandono de su proyección en el exterior, ha venido s1t.ndo la u usa ya secular de nuestros desastres y de que. poco a poco. se olvldasen los grandes servidos que, a través de la ES PA~A historia, nuestra Patria ha ven.ido prestando a ios otros pueblos. En este ca50, qué pocos .son Jos que en los Estados Umdos conoce: lll medida en que en los lllbo· res de su Ubcrtad. la nación española ayudo militar y económicamente a su 1ndt pendcncia. Hoy apunt•ra en el horizonte internacional nuevas formas de v1da supunac:ional, que las relaciones dt todo orden y Jos lmpuativos de la defensa c.omün vitntn im· primlendo a nuestro época. A este sígno de los llcmpos nuevos ha de ajustarse Ja política exterior de las naciones y dtstertar Jos conceptos vit jos y los nac.ion~li5mos aldeanos. !ncomp.:uíblts con Ja hora que nos tocó vivar . Los progre.sos de le civili~aci6rt en el mundo han sido tan rápidos y Jos avances del pcnsarnicnto universal tan ~~n~~~:ed~• u~~:'n~~:~: ~ ¡;;!~~~-º ~:a'Pc:!e:; La noblt rectoria, qut So mismo entre las nadones que en la soc1t<iad acompalia siempre al mejor dotado, y otra el que nadie pret<nda por la fuerza pupt:tu.a.r privik· gios que est~n fuera del cu3dro de los tie1npoJ moder.nos. Aumtntada el área que. akariiao los e.en flk'tos béli· cos. no cabe ya en la polilica de las nacionti; oQutl ais· lamfento en que antaño pudo e:nctrrarse: Ja politka cxt, .. rior de muchos Estados. En los modernos conmc1os los ob¡'ctivos han venido 4 ser totales, sín que detenga a los be ígerantu consideraciones de orden moral y de rcsptto a de:rtchos y sobterontas que no c:stf'n podeco.5'!mente rt:S· paldados. SI en tiempo de paz Ja razón motitl lltga a :wr tra.sce.ndtnte. dtJ<l dt serlo cuando la guerra se destn· cadena y un 1mptr•tivo de: alcanz.ar la victom a toda costa embota la conciencia de los conttndientu. Rtconoctda universalmente la amena:• de agres~n sobre el Occidtnl'e. nadie podria concebir que tsta pu· diera detenerse por ~u propia ,,.oluntad ante nurstra.s h onte:ra.s. Sul~ desconocer los ~je:tivos que el t oMu .. nismo soviético persigue. y entrt los que nuesU¡t Patria h.n venido figurando en el primer plano. No qued:m tAn lcjoo; los ditas en que Moscú mandaba en el ttcritodo de la España roja. ni lo' posteriorl.":!5 tn que In .a9ru1ón en todas sus formas st esgrimió <:ontra nue.stról N oción. des· de la conjura en los medíos íntunacionale:.s hitSl<\ fa agresión abierta sobre nuutras fronte:ras. prt!tndlendo crear e:n nuestro terdtorlo focos de terrorismo que nurstras be:nc.mérill.S fuerxas de la Guardia Civil ha vtnido tx· tirpando dude sus Inicios. Propósitos que sfgu~n c;im· peClndo en las em1s~rics de: las radio!: rOJ.lS desdt ccrrl· torio comunista. L.' dtfensa dtl OccidtnCt contra la agrui6n c.omuniJta es. pues. para nosotros uinto o mis importante: qut putda .11trlo par3 los Est.Mos. Unidos. Reconocida la amtrii\ia, la cuutión se pfontco~ en los s19uitntes tf:rmmos: ¿ Podrlamos con nuestros propios medios. sin colaboración exterior. ;\Stgurar a nuestrOt Nacj6n con1ra J!) agresión comunl1ta1 Aún en t'I caso de que este dcsider;itum fueru po.sible, ¿tuintos a1!.os nccesltaríamos para logrl\rlo? ¿Pc.rmltt Ia situactón de nutstra tconotn.ia y de nuutr~ balan:o dt pa gos. sin la ayuda de crtditos utranjuos. satisfacer a un tit.mpo las demandu dt nut.Stro resurgimiento tconómlco y de nuestra defV1sa7 La rtJruesta no puede: e:s.tar inA.J clara: 11 España quiert en e menor tiempo a.segut· arSt conua la ag_tt:•'6n exterior. nn:eslta dt la colaboración que en los Convenios se escablece. No es nuestro propósito t.I que los otros nos dditn· dan. sino el defendernos por nosotros .mismos. fao litan· do con. la preparación de nuutras B&M:S y la Intensifica .. P6g1 na 31 ción d.e nuestros. armamentos la colaboraci6rt con los Estados Unid.os frente a )a posible agresión. España no puede ser indiferente al C-xito o al fracaso d.e la oetensa ael Occidente. <.:on su colaboradón con los .t:stados Unido~ se llena un v~do gravisimo de esta adensa. So)amente Ja enunciación ael concierto dd Lonve nio hlspano-e~tadounidense. representa una j¡npor1ante victoria que lortalece la paz trente a J¡¡ ;;•mcna;i:a COmUIÜi>ta. Si h1 Nación esptlñola, sin.-itndo a su interé:s y al de la detensa del Uc~idente. inicia por estos Convenios con los Estado~ Unid.os de Amtrica UJla esu:echa coia~ boración, lo hace dej'1ndo a salvo nuestras peculiares ideologias y dentro ae nm·stra in<;obornable soberanía, dando comienzo a t11la po litica de amistad estable entre nuestras naciones. El re:>peto mutuo a lo prlvativo de c:<'ld:t nación viene siendo a travC:s de lo.s liempos la base Unica de. la posi.ble asociacióo. ::Sin él no serían posibles las organizaciones supranacionales que: la situación fote:rnádonal démanda. Si estos Convenios entrañan honda ti:asnndencla y con beneticiosos e:n los distintos órdenes al mas rápido n::sur91r de nuestra nación. seria erróneo que alguien prttrrnditra valor:::irlos por d c.'.llc:ulo lrio dd unporte mamaterial de uni'ls ayudas. ya que no se lrata de Ja venta o jusciprecio de determinadas t<idlid<ides. slno dt servir t n lil lorma más pe:dect3 a la amistad y colaboración de nueslras nactones para su ddensi' contra la zi,gres~ón en el campo de nueshas mutuas necesidades. sujeta. como ts natural. al ritmo y medida de los crtdilos y elemenlos disponibles. Si Espana. con sus propios recursos supo superar la honda crisJS que la gucna murldial le ocasionó y puede otrecer hoy una sicu¡ic:iOn cconomica luerte y estable. su ritmo, sin eml'lar90, se vt ttellado eo cua1Ho se retiere. a )o.US necesidad>?s del extnior por su sicuación de divisas, r~suJtad(I de su intercambio comercial. El atender en e<;ta~ condiciones a )as obligaciones e impcrntJ\"os' tanto dei resurgimiento económico e.orno de: S\1 defensa. obligaba a que su m.-rcha. aunque segura. tuviera que: dese:nvoJve:rse con determinada lentitu<J. incompatible con las necesidades de esta hora. Mucho es lo que con nuestros propios medios ntte:stra Nación ha venido haciendo en orden al refuerzo y renovación de. sus armamentos. pero )os progresos tt?cnicos induslriales han ~ido tan grandt:i; tn determinadas técnicas que, pe.st al rt naci.mie:nto indu:sltial de nuestra Patria. no se hacia posible- el akamar a tit:mpa dt:tc:rminadas metas sin la C(llaboradón técnica de: las naciones mas adelantadas. Raro es el pais que: por sí mismo puede atender a satisfacer todas sus necesidades. Por e)l(I, de: la colaboración internacional ~e derivan venta.Los Acue:rdos se han formulado como un "doy para qu~ dés" en el que Españtt da algo de valor pa{a los Estados Unidos y este pais hace una contribución de: .'ligo que España deseaba obtener. EISENHOWER Pégina 32 jas considera.bits para el perfeccionamiento de: nuestro armamento. Al enfrentMse Esp<t.ña con las responsabilidades derivadas del Acuerdo. naturalmente: habia de oirec:érsde !os medio.o;. complementartos p.lra acti\'ar el ritmo de su r-econstrucción y armamento. ofreciénd(lsele: los crrditos convenientes a su ec(lnomía que complemc:ntase:n los que por su propio esfuerzo ha venido mavili?ando. Los line!i a que estos créditos han de dedicarse, el vacío que en la economia española viene a llenar y Ja vigi.lancia que sobre las inversionc.s ha de mantenerse:. ofrecen plena garanlia de: que estan eliminados los riesgos de una in~ flación, Los acuerdos tknen. por otn parte:. la virtud d e ¡n~ teresar en nuestra defensa <'l la nilción más poderosa de la lierra. entendimiento que cobra especial importanciil cuando se: concierta con un pueblo como el español. de tan altos valores patrióticos y e:spJrítuales. CI que: la fina sensibilidad del pueblo de Jos Estado:! Unidos haya elevado en estos años cruciales a la Jefatura del Estado al General Eisenhower, insigne. artitice: de: su victoria, comlituyc. una garantia de que ddendt:rá ron mana firme: !os ideales de p.az y de justicia que 1os pueblos anhelao. Los Convenios 5uscritos por la Nación española \:iene:n. por otra parle, a reforzar el Bloque estrattgíco de nuestra Península. cimentado sobre el Tratado de: Amistad y No Agresión concertado con Portugal en 1939 p.ara asegurar Ja paz en esce extremo del Occidente:, y reforzado al corrf!r de estos años por los Protocolos adicionales dt 1910 y dt 1918. Sj en ill9Un momento la disparidad de los compromjsos contra1d(ls por cada parte pudier<> rozar y tener que sometuse:~ al · l'ratado oc Amistad de nuestro l'acto Ibérico. al susni~ir hoy E~paña Convenio shnilar al que en su dia concertó Portugal con idéntico fin con Las 11acione:s del Pacto del Atliinfl<:O, se rehrena aquel con la unidad geo9raíka y estratigica de la Pe-nínsuJ.a lbtrica. que puede considerarse como un todo por cuanto respec~ ia a su mayor valor en la dele:nsa del Occidente. En esta hora de plenitud de nuestra políti.ca e:xte# nor. no podía faltar nue:suo recuerdo para aquellas na.cione:s de nuestra estirpe que c:n las hora~ dificilcs es.tuvieron a nuestro lado haciend11 honor a su hidalguía. Al ofrecer aJ pueblo español a través de las Cortes de la Nación. Jos frutos c:n la política exterior de esta primera etilpa. he de destacar Ja t,rascendc:ncia que para ella ha tenido su confianza reiter.ada y la unid.ad entre Jos hombres y las tierras de España. Poco hubiera va~ lido nuestra poskión estr<Itégica y la necesidad quf! de no~otros se te:nia, si no hubiern est.,.do respaldada por la unidad y Ja dec:isón de: un pueblo de- tan a.ltos: valores e:spirituales.-FRANCISCO FRANCO. t t t ESPAt:lA
Date Issued
(No. 57) October 1953