Nuestras entrevistas

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Title: Nuestras entrevistas
Language: Spanish
Year: 1929
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Fulltext: lt{lillllf:~'iJ'~/A\~ ~lt{l'iJ'~l!WO~'iJ'/A\~ 'Don. QUJNTIN PAREDES Nació en Bangued, Abra, el 9 de septiemb. e de 1884. Estudió las primeras letras en su pueblo natal en la misma escuela primaria fundada y dirigida por su señor padre, Don Juan Paredes, pasando después a Vigan para sus estudios secundarios, luego al Colegio Seminario de Nueva Segovia, después al Colegio de $;J.n Juan de Letrán, establecido en esta capital, bajo la dirección de los PP. Dominicos, donde 'S~ graduó de Bachiller en Artes con notab-e distinción y. aprovechamiento. Decidido a abra,.ar una carrera académica, estudió la abogacía por la que sintiera honda afición, matriculándo~e para este fin en Ja "Escuela de Leyes" donde terminó todos los cursos correspondientes al grado de Bachiller en Leyes. Habilitado para el ejer. cicio de la profesión previos los exámenes de rigor' convocados por nuestra Corte Suprema. ingresó inmediatamente en el servicio del Gobierno siendo nombrado en 9 de julio de 1908 cuarto promotor fiscal de la Ciudad de Mainla, desde donde comenzó a subir a puestos más elevados y de mayor responsabilidad, merced a su mere. cimiento y raras cualidades personales, con tanta rapidez que todo el mundo no cesaba de hacerse lenguas de su valía, llegando al cabo de cinco años de permanencia en el Gobierno, o sea, el 19 de noviembre de 1913, al honroso puesto de promotor fiscal de la Ciudad de Manila. Ya en el Gobierno y habilitado en el ejercicio de la profesión, se sometió a los exámenes de grado en la "Escuela de Derecho", quien le confirió en 1910 el título de Bachiller en Leyes. Su viva afición al estudio despertó en él un gran amor por la enseñanza. Bien sabía que los conocimientos adquiridos en las aulas debfan tener su práctica aplicación, su divulgación entre los otros, ahitos de mejoramiento intelectual, así es que cuando la "Escuela de Derecho" le invitó a hacerse cargo de algunas cátedras, entre ellas la de Dererho Penal, donde está reconocido como una gran autoridad, aceptó el cometido sin ninguna vacilación, poniendo al instante a disposición de la juventud estudiosa la luz de sus conocimientos, su cultura, su talento y todos sus entusiasmos. Mientras tanto, no cesaba de conquiktar horizontes más amplios para si, sin apartarse de la enseñanza, de tan noble labor realizada con celo y cariño, que cada vez atraía mayor núcleo de alumnos a sus cátedras de derecho. En .iulio de 191 fi con ocasión de haberse creado el cargo de fiscal de la ciudad fué exaltado a •te puesto. donde sólo estuvo un año, pues. al siguiente. o ~ea en 1917, fué promovido a Procurador General de las Islas Filipinas. El 3 de julio de 1918 se hizo cargo de la Fiscalía General de las Islas Filipinas, de la que tuvo que separarse el 1. o de julio de 1920, por haber sido nombrado Secretario de Justicia, en sustitución del eminente jur~con sulto D. Victorino Mapa. que dimitió por motivos de salud. A raíz de una divergencia de criterio con el Gobernador General, presentó dimisión de tan elevado puesto en 16 de diciembre de 1921. Fué también coronel y auditor de guerra de la Guardia Nacional, cuando se instituyó este cuerpo en 1917. Una vez separado del Gobierno abrió su bufete en esta capital, siendo uno de los más acreditados. Las exigencias de su profesión le pusieron en contacto más íntimo con todo género de elementos, quienes en las elecciones generales de 1925 le sedujeron para que interveniera directamente en política como uno de los candidatos a la representación de su provincia en la Cámara de Representantes, y como en muchas partes del Archipiélago su nombre es respetado y querido y, además, es de un recuerdo amable y grato, no había para que dudar de que las .simpatías e inclinaciones del electorado de Abra serian para él, sin necesidad de estimu1os ni acicates. Y así fué que su triunfo se dió desde un principio por seguro. En dichas elecciones, obtuvo 3 900 votos contra Adolfo Brillantes y Juan Villamor, de su misma filiación política, que obtuvieron 2,181 votos el primero y 673 el segundo. En la Séptima Legislatura fué pr8"idente del Comité de Reglamentos, y miembro de los Comités Judiciales, . Obras Públicas y Revisión de Leyes. En los comicios generales de 1928 se presentó para la reelección, ante la demanda insistente de sus mismos constituyentes y simpatizadores, y, además. porque quería ver terminada su fructífera labor en pro de su provincia y de todo el pueblo de Filipinas, iniciada con feliz éxito durante el orimer trienio en que estuvo en la Cámara. En estas elecciones triunfó por 4,232 votos, siendo su contrincante Virgilio Valera. de. su misma filiación política~ quien solo obtuvo 3,343 votos. Su natural c~mpechano, cortés y amable, y su absoluta carencia de orgullo vanidctso, unidos a su espfritu justiciero y recto y a un caracter intel?l'o hicieron de él en todas las esferai:i de la actividad nacional en que tuvo particinación y desempeño conspicuos, y en especial, en la Cámara de Representantes, a uno de· los hombres que mas han atraído el anlauso v la simpatía dé sus compañero@; y del público, hasta el punto de ser no solo respetado e indicado como una de las figuras mas salientes de la política conternporanea en el país, sino también a ser querido con síncero cariño. De ahí, que cuando la marcha del actual Speaker Roxas para presidir Ja Misión Especial enviada por Ja Legislatura a los Estadds Unidos con el propósito de combatir las medidas restrictivas contra nuestros productos, la Cámara de Representantes le eleVó al Espiquerato para ocupar interinamente la pre.sidencia de la misma. El tacto, la pericia y la habilidad con que ha presidido las deliberaciones de la Cámara han despertado en todos la admiración mas fervorosa, 1siendo, por tal motivo, calificada su actuación de sabia, justa y prudente. Testimonio claro de esto es la .espontanea cooperación que hallara en todos los representantes, los resultados eficaces obtenidos durante su interinato como Speaker. En .esta Octava Legislatura pertenece corno pre¡sidente al Comité de Reglamentos y como miembro a los Comi~és Judicial, Obrf,s Públicas, Pensiones y Revisión de Leyes . -¿Cuál ha sidQ la emoción más intensa de tu vida de hombre público! La que· sentí cuando fuí obligado a aceptar mi pl'imera candidatura a un puesto t!lectivo, el tle Representante. ·un mt!s escaso antes de las elec<:iones, Jos principales de los varios pueblos de mi provincia me pusieron en · el caso de presentar mi candidatura cuando hasta entonces era yo refractario a todo lo que signifique política. Había sido atacado despiadadamente en mi vida pública y privada por mis enemigos y una candidatura supoma que tenía que ~xponer todo mi historial de 20 y tantos años de servicio público al peligro de ser desautorizado por el electorado teniendo en cuenta el corto tiempo que mediaba para hacer campaña. Conprendiendo el peligro mi señora se desmayó cuando vino el comité de nominación y ella oyó mi aceptación. Tuve momentos de· vacilación, pero la confianza en mi mismo y en mi pueblo venció mi resistencia, y ac~pté. La satisfacción mayor de 011 vida fue el triunfo abrumador que obtuve al mes de· campaña. -¿Donde crees que presta1·ias mejor servicio al pafs, en tu cargo actual o en el tuyo anterior de Secretario de Justicia? ¿Por qué? -En Ja Legislatura. Mis cinco años de política activa han modificado de tal modo mi ca· r&cter que ahora no solo miro la justicia sino la conveniencia. de mis determinaciones. El habito de practic8:r 1 . 8 justicia al:lsoluta, adquirido en mas de veinte años en el ramo ju<licial, me son mas titi!es en la poi ítica que lo sería en el ramo judicial o ejecutivo el convencionalismo aprendido en cinco años de política. -¿Qué leyes importantes crees que deben ser a.pl'obadas en el actual período de sesiones! -El proyecto que enmienda la ley sobre ban. cos; alguna ley de desenvolvimiento de Mindanao; alguna que proteja la industria pecuaria del pais; y otra que restrinja la emigración de obreros, sin contar, desde luego, con las le· yes de presupuestos y obras públicas. - ¿Qué es lo que puede esperar el país del Gobernador Da vis? -Su discurso inaugural y su mensaje a la Legislatura, así como su actuación oficial, nas lo dejan entrever . Desenvolvimiento económico; gobierno limpio, honrado, económico y eficiente, y mayor autonomia dentro de las limitac1one:s const!tucionales. - ;.Cuáles son, en tu opinión, los comités más importantes de la Cámara, y por qué? -El de Control debería ser el má~ importan .. te por la influencia que sus miembros deben tener en los comités cuyos miembros son nombrados a propuesta de aquél. No funciona sin embargo, corno era de esperar. Por tal motivo, el Comité de Reglamentos viene a ser ahora el más importante porque de hecho traza el programa de ·;· 1 1 ·=· 1 •!• i 1 i 1 1 1 11 ! i legislación en la Cámara. Pero, como todos los otros comités, no debe obrar· independientemente de los demás. Para que sus funciones no se tomen a absolutismo, tiene que contar con el apoyo y Ja simpatía de la mayoría. Por eso introduje un "modus operandi" en virtud del cual el Comité de Reglamentos pueda contar con el apoyo de los de Control, miembros todos prominentes e infuyentes en la Cámara como elegidos que fueron por Jos Representantes de sus 1·espectivos distritos !'=enatoriale;•L No cabe du· da de que ambos comités son los más importantes, sin que ésto signifique restar importancia a ninguno de los ott'OS. Este es Quintín Paredes, a .vuela pluma. No hace mucho, "EJ Cabal:ero de Piedra" un escritor local, arremetió contra su nobílisimo prestigio como su abuelo Don Quijano se lanzó con· tra Jos molinos de viento. Por haberse publicado el a1·tículo en un muy popular periódico, fué leído por todo ~l mundo. Y todo el mundo se indignó. Porque si hay algun hombre que .. rido y considerado como funcionario, político y eaballero, es Quintín Paredes, cuya humildarl ha sido siempre notoria y cuya elevación de a!ma, de caracter y de ideas se han admirado en todos los momentos por propios y extraños. JESUS BALMORI. .. ·:· ·¡1 1 i 1 1 ¡ 1 1 ! 1 DE- HILO 1 1 i 1 1 fgANCESAS 1 1 1 1 1 1 ---..--.. 1 1 1 LAS MEJORES 1 i 1 1 1 ' 1 o( 1 ·:· ·:· 1 1 i 1 ·:· *:•